Pendientes del plan de rescate

La actividad de los mercados de valores a lo largo de toda esta semana ha girado en torno al plan de rescate elaborado en Estados Unidos para los activos financieros contaminados. Los dramáticos llamamientos de los responsables económicos y políticos para su urgente puesta en marcha han encontrado, sin embargo, bastante resistencia entre los congresistas, entre los que han destacado algunos republicanos por su defensa del libre mercado en contra de medidas que consideran dignas de regímenes socialistas.

Los inversores de todo el mundo han asistido sorprendidos a este espectáculo y sus actuaciones en los mercados han obedecido a la sensación del momento, con compras si parecía que se aprobaba el plan y con ventas en cuanto aparecían problemas.

Al final de la semana el Ibex 35 ha perdido el 1,47% para cerrar en 11.387,90 puntos, lo que le mantiene dentro de esa zona difusa que perfila el movimiento lateral. De estas cinco sesiones, los inversores se han mostrado decepcionados en cuatro y sólo el pasado jueves parecían convencidos de que las ayudas llegarían y lo harían a tiempo, lo que provocó una subida del 2,93% en el Ibex 35, un avance que casi consigue equilibrar el resultado final.

Entre los valores más destacados vuelven a estar los bancos, esta vez al mostrar cierta solidez por la defensa que se está haciendo de la solidez y solvencia del sistema financiero español. La absorción por parte del Banco Popular de cuatro de sus bancos filiales, algo que el mercado llevaba esperando muchos años, apenas fue una anécdota en un mercado volcado en los grandes problemas.

Tampoco los movimientos de algunas constructoras para hacer caja con sus participaciones ha causado demasiado revuelo, aunque algunos habituales han destacado que precisamente coinciden con el incremento del control del supervisor sobre las operaciones de préstamo de valores.

Los indicadores económicos de los meses posteriores al cierre del segundo trimestre han coincidido en confirmar que el enfriamiento de la economía va a más, lo cual hizo que el dato definitivo del PIB de Estados Unidos del segundo trimestre, con un avance del 2,8%, pasara completamente desapercibido.

Los bandazos de las Bolsas han sido casi una imitación de los altibajos del mercado del petróleo, en el que el precio del barril de crudo se ha movido según el plan de rescate que apuntaba hacia un futuro con soluciones o tan lleno de problemas como el presente. Al final, el precio del barril de crudo ha subido más de un 5% en la semana.

La contratación en el Mercado Continuo ha descendido después de tres semanas consecutivas al alza, con 4.564,66 millones de euros de media. Las operaciones del "mercado abierto" también bajan, con 3.250,42 millones de euros de media, el 43% menos que la semana anterior.