La industria auxiliar del automóvil augura cierres

Los mensajes del Cluster de Empresas de Automoción de Galicia se están volviendo cada vez más pesimistas. En el último comunicado lanzado ayer, su presidente, Antonio Vega, augura un mal futuro para las empresas que no sean lo suficientemente flexibles para abordar una brusca caída de ventas. "Habrá empresas que sobrevivan y salgan reforzadas y otras cuya estructura deba ser redimensionada", pronosticó. En ciertos casos, "la continuidad podría verse en riesgo". La crisis ha provocado un descenso de ventas en agosto del 41%, en el caso de España, y de un 16% en el conjunto de la Unión Europea.

Los empresarios apelan cada vez con más fuerza al apoyo de los poderes públicos para superar la crisis. Siguiendo el ejemplo de CEOE de esta misma semana, el presidente del Ceaga se refirió a que es espera una "mayor sensibilidad" y "medidas" de la Administración que contribuyan a que "entre todos, superemos esta difícil etapa".

Ayuda

Vega solicitó ayuda para los tres grandes proyectos del Cluster: la plataforma logística, el centro de formación de automoción y el centro de vehículos inteligentes. En los nueve primeros meses del año, la producción de PSA Peugeot Citroën ha caído en su planta de Vigo un 13%, lo que traducido a unidades equivale a 39.540 coches menos. Desde los sindicatos UGT y CC OO advierten de que este otoño comenzarán a notarse los ajustes de personal en el empleo, en especial en el trabajo temporal. En todo caso, el retroceso de la actividad era esperado por la industria auxiliar, que aboga por "consolidar" lo logrado hasta ahora. Para ello, desde el Cluster han diseñado un sistema de producción que ya aplican 26 compañías y que está penado para optimizar el nivel de calidad al menor coste. Otra de las líneas de trabajo pasa por intensificar las actividades recogidas en el plan estratégico.

En cuanto a las regulaciones de plantillas, en la fábrica de PSA de Vigo continúan aplicando los mecanismos de flexibilidad laboral, centrados en la "bolsa de horas" que absorbe las caídas o aumentos de la demanda y las reparte en el tiempo, o la regulación del turno de noche, que varía según las necesidades. En 2007, el centro batió su récord de fabricación, con 547.000 vehículos. El beneficio neto de PSA España fue de 108 millones, un 76% más que en el año anterior.