Afectados por una obra de la CHJ en Sagunto paran el paso de una máquina
Más de un centenar de afectados por las obras de regeneración de la desembocadura del río Palancia en Sagunto se concentraron ayer para impedir la ocupación de las primeras parcelas por parte de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), encargada del plan. Los manifestantes impidieron la entrada de una máquina, aunque tras hora y media de concentración desalojaron la zona, como exigía la Policía Nacional.
Así lo explicó un portavoz de los afectados, que retomarán hoy la protesta. La creación de un pasillo verde que recupere el delta del Palancia implica el desalojo de unas 250 propiedades en las que hay construidas un centenar de casetas ocupadas principalmente en verano y durante los fines de semana, y huertos cultivados. Los propietarios aseguran que la CHJ no ha contestado a sus escritos y alegaciones, y piden que se aplace la ocupación de las primeras parcelas del proyecto hasta que el Tribunal Superior de Justicia dirime los recursos presentados contra la expropiación de los terrenos. La CHJ, que no respondió a la llamada de este periódico para conocer su versión, tiene permiso de un juez para entrar ya en las primeras fincas, según reconocen los afectados, que insisten en que se espere a la finalización del proceso judicial.
Fuentes de los propietarios explicaron que hay una variedad de situaciones en la zona del proyecto: hay casas que invaden parcialmente la línea de protección marítimo terrestre, otras que están legalmente registradas y una parte que no tiene título de propiedad pero lleva decenas de años en manos de las mismas personas.