Rápidas y furiosas
Rusia arrolla a España y está a una victoria de su cuarta Copa Federación en cinco años
Svetlana Kuznetsova conduce su propio Porsche por el Club de Campo de Madrid, donde su país domina desde ayer a España (2-0) en la final de la Copa Federación. Rusia, siempre un cuerpo por encima de las españolas, camina hacia su cuarto título en cinco años sin sus raquetas más temidas. No están Sharapova, Dementieva o Safina. Da igual.
En 1977, la Guerra Fría dejó una bomba deportiva. Natasha Chmyreva ganó una exhibición en Estados Unidos a Chris Evert y avisó de lo que estaba por llegar. Sin Chmyreva y Morozova, primera finalista rusa de un grande (Roland Garros 1974), no se entiende que Zvonareva y Kuznetsova se impusieran ayer a Anabel Medina (6-3 y 6-4) y Carla Suárez (6-3 y 6-1). Sin ellas no se explica que haya cinco rusas entre las 10 mejores tenistas del mundo. Y sin ellas no se comprende que desde 2004 Rusia haya ganado cinco grandes, cuando antes no había logrado ninguno.
La armada que iniciaron Chmyreva y Morozova es inagotable. "Ya hemos ganado muchas Copas (3)", dice Larisa Savtchenko, ex jugadora y segunda capitana. "Ya no importan. El año que viene quiero probar caras nuevas. ¡Tenemos tantas jugadoras!".
Hoy. 12.00 horas: A. Medina-S. Kuznetsova. A continuación: C. Suárez-V. Zvonareva; N. Llagostera y V. Ruano-E. Makarova y E. Vesnina.
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