El alcalde de Chiclana aspira a gobernar en minoría

"Son cosas de la condición humana". El alcalde de Chiclana (Cádiz), Ernesto Marín (PP), todavía no entendía ayer los motivos por los que uno de sus tres socios de su gobierno cuatripartito, el PSA, ha roto el acuerdo. "Por la mañana habíamos estado reunidos, habíamos hablado de proyectos futuros y no esperaba que se marchara. Pero el ser humano es así", relataba. Ahora su gobierno es tripartito, junto a sus otros siete ediles populares, dos de IU y dos del PA. Está en minoría. 12 frente a 13 que tiene la oposición formada por PSOE, una edil expulsada del grupo de IU y ahora la concejal del PSA. "Si Zapatero puede hacerlo, yo también".

En realidad, la decisión de la asamblea del PSA tomada en la noche del viernes no fue nada imprevista. La única edil de este partido, María Ángeles Polanco, ya había expresado críticas contra el funcionamiento del gobierno local y había convocado esa reunión por las dudas que le habían surgido tras la reciente declaración de tránsfugas del alcalde y los ediles de IU. Casi todos daban por hecho el fin del cuatripartito antes del encuentro.

Ernesto Marín reconfigurará a partir del martes su gobierno. Tendrá que repartir las áreas de Policía y Tráfico, que ostentaba el PSA, entre su partido y sus todavía socios. Cree que podrá mantener el sillón hasta 2011. "La edil del PSA ha dicho públicamente y me lo ha dicho a mí en privado que nunca pactaría con el PSOE, así que estoy tranquilo", explicó ayer el alcalde.

El PSOE, en cambio, sí aspira a pactar con el PSA y con la otra edil de IU, Nadine Fernández, expulsada recientemente del grupo municipal de esta formación en el Ayuntamiento.