La Xunta aprueba el plan de Santiago con 37.000 pisos nuevos

El Plan General de Ordenación Municipal de Santiago fue aprobado ayer definitivamente en su totalidad por la Consellería de Política Territorial. Así lo anunció el alcalde de la ciudad, Xosé Sánchez Bugallo, quien señaló que Santiago es la "única de las ciudades gallegas" que tiene el plan general aprobado en su totalidad y, además, adaptado a la nueva Lei do Solo de Galicia.

La reserva de suelo destinado a vivienda protegida se eleva al 45,5%

El proyecto, que acumula un retraso de dos años según recordó el alcalde, ya contaba desde octubre del año pasado con la aprobación parcial de la Xunta. Política Territorial condicionó el visto bueno de la totalidad del documento a la realización de una serie de correcciones en el documento por parte del Ayuntamiento.

Tras la corrección de las deficiencias, el plan pasa de contar con 38.071 viviendas nuevas, tal y como estaba previsto en su aprobación provisional, a construir 37.188 pisos. La lectura de Sánchez Bugallo es que esta nueva previsión del plan se traduce en un "crecimiento razonable" de la ciudad para los próximos años.

La Consellería de Política Territorial dejó pendientes de aprobación el año pasado 17 de los 45 suelos urbanizables no delimitados, 37 de los 109 núcleos rurales definidos en el plan, y diferentes ámbitos de suelo urbanizable delimitado, de los cuales dos polígonos eran cuestionados y en los demás se pedían correcciones que hacían referencia a temas "de ámbito secundario", como las "reservas de infraestructuras".

El alcalde destacó la "enorme presencia en Santiago" de vivienda protegida. El suelo delimitado, subsistente y consolidado, dentro de los que se contabiliza los pisos de protección oficial, suman 26.000 viviendas. De ellas, el plan general prevé la construcción de más de 11.000 nuevas viviendas protegidas. La reserva de suelo para este tipo de pisos llega al 45,5%, lo que "supera" el porcentaje del 40% que contempla la modificación de la Lei do Solo de Galicia, en vigor desde el pasado julio.

La superficie destinada a suelo industrial y uso terciario se cuadruplicará con respecto a la ya existente. El plan de urbanismo contempla dedicar ocho millones de metros cuadrados a este uso, que se sumarán a los dos millones con los que ya cuenta la ciudad.

El alcalde hizo hincapié además en la "apuesta por las infraestructuras de comunicaciones y los espacios verdes". El plan general prevé cinco millones de metros cuadrados más de zonas verdes. "Cuando acabe el plan tendremos 40 metros cuadrados de zona verde por habitante", apuntó el alcalde.

Para Sánchez Bugallo, la aprobación definitiva supone un "reconocimiento al trabajo" por parte de la consellería de Política Territorial. "Queda perfectamente dibujada qué ciudad queremos tener hasta el 2024", aseguró el alcalde. El plan general tiene una vigencia inicial de 12 años (2020), prorrogables otros cuatro.

El alcalde se mostró satisfecho por la aprobación del proyecto, del que destacó la "apuesta total por la calidad del planeamiento" y el "esfuerzo político y personal" de los redactores técnicos y responsables políticos del documento urbanístico que define la ciudad.

El plan acumula un retraso de dos años en su aprobación definitiva. En 2001, según recordó el alcalde, las previsiones del Ayuntamiento era que estuviese en vigor en cinco años. Sánchez Bugallo aludió a la entrada en vigor en 2002 de la Lei do Solo de Galicia, "en mitad del proceso", para justificar su primer retraso, ya que el documento tuvo que adaptarse a la nueva legislación. En 2005 el consistorio lo aprobó inicialmente y, tras la exposición pública, recibió 4.200 alegaciones. En 2006 se aprobó provisionalmente y se remitió a la Xunta.

Tras este último estudio de los técnicos del Ayuntamiento, "absolutamente pormenorizado" según el alcalde, el visto bueno de Política Territorial permite la puesta en marcha del plan.