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Reportaje:

Mientras usted no estaba

Crónica de un verano madrileño salpicado por la tragedia de Barajas

Patricia Gosálvez

-¿Qué tal las vacaciones?

Antes de dejarle contestar, el vecino que se ha quedado en Madrid informa al que viene de veraneo.

-¿Te habrás enterado de lo de Barajas? Se estrelló...

-Claro. Una putada. No hay palabras.

Interrumpiéndole, sin ganas de discutir lo terrible en el ascensor, rodeado de maletas, el vecino que vuelve informa al vecino que se ha quedado.

-Las vacaciones estupendas, dos meses, imagínate. ¿Aquí, qué tal?

-Ha subido el metro.

Ahí tenemos un tema apto para ascensores. Quienes vuelvan hoy de vacaciones encontrarán que el metro, los autobuses y los cercanías han subido de media un 3,27%. Es la primera vez que el transporte público sube dos veces en un mismo año (en enero y en agosto). El nuevo bonometro cuesta siete euros y los abonos de transporte han subido un par. Cosas del alza del barril Brent, dicen. Los usuarios, los sindicatos y el socialista Eugenio Morales votaron en contra. "La mayoría del transporte en la Comunidad no va sobre ruedas ni por el asfalto, o sea, no usa petróleo", dijo Morales, no sin razón. Hay un consuelo de tontos: ya se puede hablar por el móvil en todas las estaciones del centro, salvo en Sol, que sigue en obras.

La M-501 se acabó a toda prisa, no fuera a ser que algún tribunal la parara
Al 'caso Coslada' le salió un hermano pequeño: esta vez tocó en El Molar
Parece que el alcalde quiere derruir La Peineta. Él lo niega

Sin salir del subsuelo, ni de lo anecdótico, en Atocha (donde hubo una explosión de gas, qué susto) han colocado dos enormes cabezas de la nieta de Antonio López para recibir a los viajeros del AVE. El bebé, gigante para seis meses, tiene los ojos cerrados en una y abiertos en la otra.

Abrir los ojos de los viajeros es, precisamente, lo que pretendía el grupo Toxic Lesbians cuando retocó la cartelería del Metro haciendo suyo el lema del Día del Orgullo: "Por la visibilidad lésbica". Por ella, y por la gracia, cambiaron con pegatinas los nombres de varias estaciones. Tetuán pasó a ser Teta, Santo Domingo, Santas Domingas y Astilleros, Tortilleras. Ni pizca de gracia tuvo sin embargo lo de Casa Parrondo. El dueño de la mítica sidrería echó de malos modos a dos chicas por darse un pico. Las llamó "basura". Desde entonces se han celebrado besadas en su puerta al grito de "¡España entera se siente bollera!".

Mientras, sobre la tierra, tierra protegida en este caso, se desdobló finalmente la polémica M - 501, la empantanada carretera de los pantanos. Se acabó a toda prisa, no fuera a ser que algún tribunal se pusiera ecologista y parara las obras. Bajo las apisonadoras ha caído incluso (figuradamente, se entiende) un interventor del PP que había escrito un informe negativo contra el proyecto de Aguirre. Sus antiguos compañeros celebraron la inauguración con una paella de 300 kilos en Navas del Rey, y eso que la carretera acabada, acabada, no está. Faltan por implantar la mitad de las medidas ambientales que deben compensar el daño hecho por el asfalto. Se irán haciendo, a bombo y platillo, es de esperar, ya que, según un mail interno del departamento de Protocolo de la Consejería de Transportes, el objetivo ahora es adornar actos y "vender ecología".

-Y de lo del héroe que quiso proteger a una maltratada y acabó en coma, ¿te has enterado? -suelta, sin protocolo alguno, el vecino que se ha quedado.

Un profesor universitario ve a un hombre agrediendo a una mujer e interviene: "Voy a llamar a la Guardia Civil". No le dio tiempo. El agresor le ataca por la espalda. Cuatro días después de la paliza, y tras visitar un ambulatorio y dos hospitales públicos, Jesús Neira entra en coma. El caso está en el Juzgado de Majadahonda. Tienen tarea. Podría haber dos causas: por un lado, contra el agresor detenido, Antonio Puerta; por otro, contra los médicos de la Comunidad de Madrid por negligencia. Neira tenía dolores de cabeza y fue devuelto a su casa hasta tres veces con paracetamol y sin un escáner. La Comunidad insiste en personarse como acusación popular y quiere dividir las causas entre distintos juzgados. La familia de Neira quiere todo lo contrario.

La crónica negra del verano no acaba ahí, es violenta y dolorosa y se ha cobrado 11 muertos. El último, un joyero degollado el pasado sábado. Antes, también con el cuello rajado, un vigilante a punto de irse de vacaciones; un ciudadano chino tiroteado en un karaoke, un ejecutado en plena calle por un ajuste de cuentas, un octogenario asfixiado con una funda de almohada para robarle una caja fuerte...

Sólo en el primer fin de semana de agosto hubo tres tiroteos. En plena guerra contra el aumento de los crímenes a cuchillo, la policía se encontró con que también hay más pistolas. Pistolas como en las películas, con balas perdidas. Metro de Bilbao, ocho de la mañana del sábado 4 de agosto. Una noche de copas termina en pelea con un hombre en el suelo, la mandíbula rota. El herido saca un arma y dispara. La bala atraviesa a un señor que está de paseo y luego a otro que pasaba por allí. El primero no se da cuenta hasta que nota un escozor en el costado, el segundo cree que ha sido un perdigón. Le llevan a urgencias, y en la sala de espera se encuentra con el de la pistola y la mandíbula rota. Una casualidad de guionista. Lo que no es casual es la gresca con la que arranca la historia: la mayoría de las reyertas ocurren en fin de semana, de noche y en zonas de marcha.

También fueron de película los múltiples alunizajes en concesionarios de coches y en escaparates de lujo de la Milla de Oro. Audi estrellados contra verjas para robar Mercedes, zapatos caros y gafas de diseño.

-Y los políticos, ¿qué hacen? -pregunta en el ascensor el vecino que vuelve, harto de truculencias.

-A Esperanza Aguirre le hicieron una foto muy graciosa, tocando la batería.

La instantánea se produjo durante su visita a los locales de ensayo que la Comunidad presta a los músicos en las paradas de Cuzco y Usera. La presidenta mediática también se hizo foto con Excavolina, que horada el subsuelo para que el metro llegue al barrio de La Fortuna. No va a ser Gallardón el único que presuma de tuneladoras con nombres guapos. Aprovechando el verano, Aguirre, de paso, privatizó la gestión de los tres nuevos hospitales de la Comunidad.

-¿Y Gallardón cómo anda?

-Más olímpico que nunca.

En busca de un nuevo récord, parece que el alcalde quiere destruir La Peineta. Él lo niega. Fuentes del Ayuntamiento dijeron a este periódico que el estadio que alojará al Atleti será "100% nuevo", aunque se negaron a mencionar la palabra "derribo". ¿Es "derribo" a La Peineta lo que "crisis" es a la economía? Ya veremos si lo que no se dice es, al final, lo que pasa, y el tabú acaba siendo vox pópuli. De momento, la "eso" económica está evitando el "eso" del estadio de San Blas. Es decir, sin pasta no hay obra, ya que toda la operación está supeditada a la recalificación del Vicente Calderón, de la que se estaba encargando en parte Martin-Fadesa, la mayor inmobiliaria de España, que en agosto ha declarado una suspensión de pagos. Perdón, un "proceso concursal". Un "eso".

En la corrupción también hay muchos eufemismos. Por ejemplo, "guante blanco". Por ejemplo, "Guateque", que viene a significar "fiesta de funcionarios que trafican con licencias municipales". El caso ha goteado titulares este verano (dueños de bares admitiendo que "movieron hilos" para conseguir licencias, funcionarios admitiendo que falseaban documentos para "tranquilizar a los clientes"). Salpicó al primer edil del PP, el concejal del distrito de Salamanca, Íñigo Henríquez de Luna, imputado por supuestas irregularidades en la concesión de licencias a la tienda Becara. Según el edil, todo es mentira y a los denunciantes, la familia Goyeneche, vecinos de la tienda, les mueve la venganza, ya que a ellos sí se les negó el papelito para montar un negocio en casa.

Pero más allá de chanchullos -el juez decidirá quién miente-, fue curioso ver al PP como una piña respaldando al concejal. Henríquez de Luna ganó notoriedad hace unos meses al promover las primarias en el PP cuando la canción era que Esperanza se quería postular como líder del mundo libre. A pesar del aguerrido aguirrismo del concejal, cuando las cosas se le han puesto feas, Gallardón ha salido en su defensa. Yo critico a mi familia, pero a ti, ni se te ocurra mentarme a la madre.

No todo es armonía, sin embargo, en la familia popular. A principios de julio una trama de espionaje, versión la TIA, animó la adormilada vida política. Los hechos ocurrieron a finales de junio (aunque se supieron después). Aguirre destituye a dos consejeros rebeldes, Manuel Lamela y Alfredo Prada, que le han hecho ojitos a Rajoy en el Comité Ejecutivo. Poco después, el despacho de un subordinado de Prada en el Campus de Justicia es registrado y expoliado por el director de Seguridad de la Comunidad, Sergio Gamón, que es, a su vez, subordinado de Francisco Granados, nuevo consejero de Justicia que es, a su vez, persona de confianza de Aguirre. Salta la denuncia y unos y otros desmienten y eluden responsabilidades. El más colorista, Gamón; "obedecía órdenes", dice: "Me han metido en un fregado y no tengo ni fregona". Aún sin fregona, el día 17 de julio, le barren del cargo. No es grave. Cuatro días después le dan otro.

Hablando de familias, y salvando las distancias, le salió un hermano pequeño al caso Coslada (a cuyo padrino, Don Ginés, le acaban de denegar la libertad por miedo a que haga de las suyas). La corrupción policial tocó esta vez en El Molar, donde el jefe de la Policía Local y dos guardias civiles se vieron implicados en una trama de menudeo de drogas. Un caso plagado de eufemismos del tipo "hacer la vista gorda" y "a ver esto cómo lo arreglamos". El alcalde, del PP, ha suspendido al jefe de policía, que está en libertad con cargos, y los guardias civiles han pagado su fianza y están en la calle.

-Me están entrando unas ganas de gritar... -dice el vecino que vuelve, agotado.

-Pues en las fiestas de La Paloma una rubia ganó El grito más largo haciendo 29 segundos.

Porque también hubo fiestas patronales, como cada verano en Madrid, mientras usted no estaba. Encierros en Leganés y en San Sebastián, con heridos, y macroconciertos en el Saturday Night Fiber y en el Summercase, con incautación de 120.000 pastillas de éxtasis. Al Rock in Rio asistieron 200.000 personas, incluidas Bob Dylan, Franz Ferdinand y Amy Winehouse, que, tras meses de especulación, al final cumplió. Como la diva, diosa y arrastrada al mismo tiempo, la realidad suele tener dos caras. Con suerte, ambas aparecen en los periódicos. "Mejor, evite Lavapiés", se titulaba un artículo en julio sobre los consejos que dan en las oficinas de turismo a los extranjeros. Dos semanas después, "Lavapiés es el mejor pueblo de España", titulaba una entrevista con un guiri ilustre, el hispanista Ian Gibson. Todo depende de cómo se mire. Por ejemplo, las asociaciones de padres se quejan de que 700 alumnos empezarán el curso en barracones, mientras la Comunidad presume de un récord a la baja en "las aulas transitorias".

En las historias, siempre hay otro lado. En Villaverde tiene dos colegios. Uno es grande y nuevo y está medio vacío, el otro se está cayendo y está a reventar de niños. En el primero, el 60% de los alumnos son gitanos, y el resto, inmigrantes. La solución de Educación es poner a los payos en el colegio gitano y viceversa. Los payos votaron que sí a la única solución que se les ofreció. Los gitanos van a denunciar. "Nos están robando un colegio hermoso, para meternos en el que no quieren para sus hijos", dicen.

Otro ejemplo: el 11 de julio se liberalizaron los horarios de las tiendas, y los usuarios tan contentos de poder comprar de noche. Los pequeños comerciantes y los empleados de las grandes superficies están, sin embargo, preocupados. "Antes podía marcharme a casa en transporte público, pero ahora no", se quejaba una dependienta del Carrefour en estas páginas. Lo que conviene a unos, hace polvo a otros. Suele pasar.

-Algo bueno, sólo bueno, habrá pasado -grita el que vuelve.

-¿Hubo un tercio menos de coches en las calles? -duda el que se quedó.

Cierto. Y un juez concedió un turno fijo a una cajera que lo tenía partido para que pudiera cuidar a su hija. Y, sin esperar a llegar al hospital, nacieron bien cinco bebés. No sabemos si sus madres podrán conciliar, pero suben la media de los 25 alumbramientos en la vía pública que se dan a lo largo del año. Óscar Iván nació en la ambulancia, Desiree en un taxi. Cristian, en plena calle, fue atendido por dos policías municipales en la misión "más bonita" de su vida.

En el ascensor, tras una sonrisa tonta, un suspiro y un chasquido de lengua, el vecino que se ha quedado en Madrid insiste.

-Qué lástima lo otro; has visto las familias en la tele...

-Mi piso, yo me bajo aquí -le interrumpe de nuevo el vecino que vuelve, y piensa que para lo malo, sólo malo, se inventaron los minutos de silencio.

Amy Winehouse en Rock in Rio.
Amy Winehouse en Rock in Rio.C. ÁLVAREZ
La pista en la que se estrelló el vuelo JK5022 de Spanair, desde el mirador del Picón del Cura, en Paracuellos de Jarama.
La pista en la que se estrelló el vuelo JK5022 de Spanair, desde el mirador del Picón del Cura, en Paracuellos de Jarama.ULY MARTÍN

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Sobre la firma

Patricia Gosálvez
Escribe en EL PAÍS desde 2003, donde también ha ejercido como subjefa del Lab de nuevas narrativas y la sección de Sociedad. Actualmente forma parte del equipo de Fin de semana. Es máster de EL PAÍS, estudió Periodismo en la Complutense y cine en la universidad de Glasgow. Ha pasado por medios como Efe o la Cadena Ser.

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