Contra Rusia, cita con la historia
Ha llegado el momento clave de estos Juegos para nuestras chicas. El temido partido de los cuartos de final que te da todo o nada. Pasas de la gloria a la decepción en cuestión de minutos, te ves luchando por una medalla o viendo cómo el campeonato llega a su fin sin conseguir el objetivo inicial. España está entre los ocho mejores equipos de la competición, pero, ambicioso como es, aspira a lo máximo.
El rival [hoy, 16.15, hora peninsular española] es Rusia. Se reedita así la final del Europeo del año pasado, en el que las rusas vencieron a las nuestras, y el cruce de cuartos del último Mundial, en el que nos dejaron fuera de la lucha por las medallas en los últimos segundos. Las rusas no están al nivel de otros campeonatos, cuando ganarles era impensable, pero lo que está claro es que es uno de los peores equipos que nos podían tocar, junto a Australia. El partido perdido ante las chinas nos ha pasado factura relegándonos a la tercera plaza del grupo.
En los últimos enfrentamientos entre ambas selecciones ha quedado patente que las rusas no se sienten cómodas con el juego que desarrolla España. Seguro que, dejando de lado a Estados Unidos, éramos el siguiente equipo que no se querrían encontrar. Antes de aterrizar en tierras chinas, en los partidos de preparación, el combinado español ganó con solvencia al ruso en Moscú. Esto quiere decir que se puede ganar. No sería la primera vez.
El conjunto entrenado por Grudin está liderado en dirección y anotación por la escolta Korstin, bien secundada por la reciente nacionalizada Becky Hammon y por Abrossimova, de la NBA femenina, una línea exterior con mucho talento y experiencia. Al igual que el juego interior, en el que destaca Stepanova, que no está haciendo un buen campeonato, pero que por su altura y su polivalencia puede hacer mucho daño. Shegoleva y Ossipova, falsos pívots, tienen un juego muy versátil y pueden darnos más de un problema por su movilidad. Es un equipo que cuando juega cómodo puede llegar a ser una apisonadora, pero si el marcador es ajustado y la defensa muy agresiva no se sienten a gusto y les pasa factura en los momentos importantes. España necesita hacer un partido casi perfecto para conseguir la victoria, basando su juego en una gran defensa durante los 40 minutos, sin olvidar la importancia del rebote y el juego en equipo.
El baloncesto femenino español participa en sus terceros Juegos y hoy puede hacer historia en nuestro deporte pasando por primera vez a unas semifinales olímpicas. En Atenas perdimos el cruce ante Brasil por cuatro puntos: estuvimos a un paso de conseguirlo. Confiemos en que la experiencia vivida hace cuatro años servirá para no caer en los mismos errores. El rival no es el más deseado, pero, conociéndolas, las españolas saben que se juegan mucho y no van a desaprovechar esta oportunidad. Hoy el baloncesto femenino tiene contra Rusia una cita con la historia.
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