El interventor de Málaga supo por la prensa de convenios que debe fiscalizar

El interventor general del Ayuntamiento de Málaga se enteró por la prensa de la firma de dos convenios urbanísticos que generarán ingresos de 86 millones de euros al consistorio, cuando según la ley es preceptivo que emita informe previo de fiscalización sobre este tipo de acuerdos. Así lo admite el interventor en un escrito que dirigió el pasado 6 de agosto a la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) para pedir que "a la mayor brevedad posible" le fueran remitidos los expedientes completos de los dos convenios para poder informarlos.

Las determinaciones urbanísticas contempladas en ambos convenios, que implican la construcción de más de 1.400 viviendas en total, están incluidas en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que se someterá a aprobación provisional en el pleno pasado mañana. En el escrito, el interventor recuerda que la Ley de Haciendas Locales determina que todos los actos de las entidades locales y sus organismos autónomos que den lugar al reconocimiento y liquidación de derechos han de ser objeto de fiscalización y deben tener informe previo de Intervención. "A la vista de las noticias de prensa, la suscripción de tales convenios suponen el reconocimiento de una serie de derechos a favor de esta corporación", sostiene y asevera que "no consta a esta intervención que se hayan remitido los respectivos expedientes para su preceptiva fiscalización".

El convenio de La Térmica fue acordado el mismo día 6, aunque ya el equipo de Gobierno había dado noticias de él. Pero el de Arraijanal se firmó el 9 de julio, es decir, casi un mes antes de que el interventor lo pidiera por escrito.

Este último convenio resulta especialmente controvertido porque contempla una urbanización con más de 650 viviendas, hotel y equipamiento comercial en una parcela que el Ministerio de Medio Ambiente trata de proteger, para lo que tiene en trámite de expropiación la franja de 80.000 metros cuadrados contigua a la playa. La superficie total del suelo supera los 500.000 metros cuadrados. Además, el Plan de Ordenación del Territorio de la Aglomeración Urbana de Málaga (POTAUM) que promueve la Junta reserva este suelo para parque. En principio, y así está recogido en el documento del PGOU que sometió a aprobado inicial hace dos años, el Ayuntamiento proyectó en la playa de Arraijanal una marina deportiva y una urbanización con 1.300 casas, rechazada por Costas y Aviación Civil al estar en la zona de exclusión del aeropuerto. El Ayuntamiento ingresará 28 millones.

El otro convenio con Endesa y Marina Real Estate contempla la urbanización de la antigua Térmica donde se proyecta una plaza singular que cierra el paseo marítimo de Poniente, con cuatro edificios de más de 20 pisos y 773 viviendas, y genera ingresos de 58 millones.

Un portavoz municipal afirmó ayer que los convenios tendrán el pertinente informe de intervención. Para el portavoz del PSOE, Rafael Fuentes, el episodio con intervención "evidencia una vez más que este es el plan del oscurantismo, no se ha contado con los vecinos, ni con los grupos políticos, y, algo que parece de ciencia ficción, tampoco con el órgano que debe fiscalizar y tiene que dar el visto bueno".