Un incendio obliga a desalojar a varias decenas de vecinos en Llíber

Un incendio arrasó ayer algo más de tres hectáreas de pino y matorral en una zona de gran importancia paisajística en el término municipal de Llíber, en la comarca de La Marina Alta. Varias decenas de vecinos abandonaron sus chalés en la zona por recomendación de los bomberos y la Policía Local, aunque fuentes de la Generalitat aseguraron que el fuego no obligó a dictar una orden de evacuación.

"El hecho de que haya dos frentes da que pensar", comentó el alcalde

Se trata del primer incendio importante que se registra en la Comunidad Valenciana en lo que va de verano. Pero, aunque el alcalde de la población, Juan Bautista Reus, afirmó por la tarde que el fuego había arrasado 30 hectáreas de pinar y monte bajo y que había obligado a desalojar una cincuentena de chalés, fuentes del Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat informaron a primeras horas de la noche de que el incendio sólo afectó a 3,16 hectáreas de terreno y que no se ordenó ninguna evacuación.

Tanto el alcalde de Llíber como los bomberos apuntaron a que el siniestro fue intencionado, ya que el fuego se originó en dos focos que apenas distaban 700 metros entre sí y además comenzaron de forma casi simultánea, cerca de las 11 de la mañana. Las altas temperaturas y el fuerte viento, que en algunas ocasiones sopló en contra de la zona donde trabajaban los medios de extinción, avivaron el incendio, que no fue totalmente controlado hasta las cinco de la tarde.

El primero de los focos se localizó en las cercanías de la urbanización de El Collado y obligó al desalojo preventivo de más de 40 viviendas, cuyos vecinos se refugiaron en los bancales cercanos a sus casas. Aunque las llamas no llegaron a dañar ningún chalé, se acercaron de forma muy peligrosa a tres de ellos, que fueron protegidos por varias unidades de extinción. Este primer frente fue sofocado hacia las dos del mediodía.

El segundo se originó en el paraje rural de Agres, muy cerca del primero, y se logró controlar a las cinco de la tarde con la ayuda de los seis medios aéreos que participaron en las tareas de extinción. En esta ocasión, según el alcalde de Llíber, fueron desalojadas a causa del humo otras ocho viviendas, en las que se encontraban unos 15 vecinos que no pudieron volver a sus hogares hasta primera hora de la noche, siempre según fuentes municipales. El alcalde admitió que "el hecho de que se hayan producido dos frentes a la vez da mucho que pensar", por lo que no descartó la intencionalidad del suceso. La tesis de la intencionalidad del siniestro también fue compartida por el jefe de bomberos de La Marina Alta, José Melenchón.

Las llamas afectaron a una zona boscosa formada sobre todo por pino joven con el que se repobló el área tras otro fuego sufrido hace 15 años.