_
_
_
_
Crónica:me cago en mis viejos
Crónica
Texto informativo con interpretación

DÍA 4

Me ha llamado mi hermana mayor. Mi hermana mayor está casada y tiene un crío de nueve o diez años. A la segunda frase me he dado cuenta de que me llamaba por encargo de los viejos y se lo he dicho. Te han dicho los viejos que me timbres. No, por qué. Porque sí, porque lo noto, hostias, diles que sí, que estudio, pero que no me den la vara. Mi hermana ha permanecido en silencio, ha suspirado, ha colgado cabreada y luego me ha vuelto a llamar. Mira, sí, dice, están preocupados contigo porque pasas mucho tiempo en la habitación. Por lo visto no has bajado a la playa todavía, ¿te ocurre algo? De modo que no era porque salía, sino porque no salía. Me dieron la monserga con que estudiara, con que nada de estar todas las noches por ahí, de baretos, hasta las tantas y ahora resulta que se preocupan porque no salgo. De lo que no salgo es de mi asombro... (aquí vendría un taco, pero me han dicho en el periódico que modere un poco mi lenguaje). Diles que estoy bien, le digo a mi hermana, pero que he cambiado, que me he vuelto un empollón de repente.

Rostro pálido. Si yo fuera mi hijo, me preocuparía. Pero no soy mi hijo, sino el hijo de ellos. Que se preocupen ellos
Lee el DÍA 3
Lee el DÍA 5

Salgo de la habitación en busca de un poco de aire y me encuentro en la cocina con mis viejos y unos amigos de mis viejos. Nos miramos como si ellos fueran marcianos para mí y yo marciano para ellos. Han traído marisco y se disponen a cocinarlo. Yo pongo cara de asco, para fastidiar. Soy el gusano de la fruta. ¿Ves la cara de un tío cuando abre una manzana y encuentra dentro un gusano? Ésa es la cara de mis padres y de los amigos de mis padres cuando abro la puerta de mi cuarto y me ven salir. Me la suda. Que no me hubieran obligado a venir. Lo cierto es que al mear me he visto en el espejo y parezco un gusano de seda. Todo el mundo está más o menos moreno y yo sigo pálido. Rostro pálido. Si yo fuera mi hijo, me preocuparía. Pero no soy mi hijo, sino el hijo de ellos. Que se preocupen ellos. Yo bastante tengo con sacar adelante este diario, tío.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_