La juez ordena el embargo de los bienes del propietario de Contsa

El caso Contsa, el grupo empresarial sevillano declarado en concurso de acreedores (suspensión de pagos), tras dejar de pagar millonarios intereses a clientes que le prestaron grandes sumas de dinero a cambio de acciones y préstamos altamente remunerados, puede dar un importante giro antes de fin de mes.

Salas reconoce haber vendido un piso 12 días antes de suspender pagos

Los administradores judiciales nombrados por la juez Mercantil de Sevilla han solicitado medidas cautelares contra el presidente de la sociedad, José Salas Burzón, para asegurar el patrimonio de Contsa, a la vista de la falta de colaboración del propietario, de la falta de información que la empresa ha facilitado a los administradores judiciales y de los hechos e indicios constatados de que la empresa podría haber incurrido en una quiebra fraudulenta.

En este sentido, la juez ya ha procedido a decretar, mediante un auto de 31 de marzo pasado, varias medidas cautelares, como el embargo de los bienes personales de José Salas Burzón, entre ellos su vivienda habitual de El Zaudín, y otras fincas de Jerez y Sevilla de las que es propietario junto a familiares. Los administradores judiciales podrían emitir a finales de mes su declaración de "concurso culpable", es decir, aquel en los que en la generación o agravación del estado de insolvencia de una sociedad hubiera mediado dolo o culpa grave del deudor, o de sus representantes, administradores o liquidadores.

En caso de que se declarase culpable el concurso, y dado que existen decenas de afectados de diferentes provincias españolas, la juez podría remitir el caso a la Audiencia Nacional, y paralizar la vía penal que tiene abierta la juez de Instrucción número 17 de Sevilla por las denuncias de tres clientes.

Ayer, José Salas Burzón, quien pagaba intereses de hasta el 40% a clientes que le prestaban dinero para especular en la compra-venta de inmuebles, volvió a los juzgados de Sevilla, esta vez a declarar por la tercera denuncia penal por alzamiento de bienes, estafa y falsedad presentada por un cliente.

Según esta tercera denuncia, Salas Burzón vendió 12 días antes de declararse en concurso de acreedores, un inmueble en el barrio de Los Remedios sevillano, cuyo importe, según declaró ayer lo utilizó para pagar a dos acreedores. Asimismo, reconoció otras ventas, aunque, según los letrados presentes en la declaración ésta fue muy "confusa" y llenas de "inconcreciones", al tiempo que Salas volvió a desviar hacia su hermano fallecido en un caso de suicidio, las responsabilidades contables de la compañía.

La tercera denuncia penal sobre la que ayer respondió Salas aporta además otros datos como el hecho de que 20 propiedades inmobiliarias de Contsa, con las que supuestamente garantizaba los fondos de sus clientes aparacieran en el registro hipotecadas un mes antes de la declaración de suspensión de pagos por importe de cinco millones de euros.

Contsa en su declaración de "concurso voluntario de acreedores", que no fue aceptada por existir una petición anterior de un cliente que lo demandó como "concurso necesario", declaró deudas con 609 acreedores por importe de unos 50 millones de euros. El Juzgado Mercantil acumula ya, sin embargo, actuaciones de unos 1.500 acreedores, por un importe cifrado en unos 100 millones de euros.