Pilar Távora reivindica al "mariquita"

La cineasta andaluza Pilar Távora comenzará el próximo lunes a rodar en Zahara de la Sierra su última película, Madre amadísima. Según anunció la directora en Sevilla, el rodaje, que durará siete semanas, se efectuará en Carmona, Gerena y Valencina de la Concepción, en Sevilla; y Zahara de la Sierra en Cádiz, tratándose de una película con "denominación de origen" para la que se ha realizado un casting "cien por cien andaluz".

Madre amadísima es la historia de Alfredito, un homosexual de 56 años, vestidor de la Virgen, que nace en pleno franquismo "cuando los homosexuales eran los mariquitas para todo el mundo". La película cuenta la vida de este personaje desde su juventud hasta su madurez, a través de "sus anécdotas, sus desengaños y su sufrimiento".

La cineasta sevillana destacó, no obstante, que esta producción "no es una película de homosexuales", sino "de un mariquita de pueblo", una visión que se aleja de la del "mundo gay magnificado" que en su opinión convierte a este colectivo en "ciudadanos de segunda clase". Pilar Távora reconoció que se trata de una historia "arriesgada" que puede "suscitar críticas desde algunas instituciones", pero que está contada desde "el absoluto respeto y la libertad que tiene cualquier ser humano a decir lo que piensa".

La directora resaltó, además, que "la historia del mariquita no está contada", y que era "imprescindible que esta historia llegara al cine".

Éste es el tercer largometraje de Pilar Távora, después de Yerma y Nanas de espinas.

El director teatral Santiago Escalante, autor de esta obra, es también el responsable de la adaptación del guión al cine. El actor Ramón Rivero, que interpreta a Alfredito en la obra teatral, llevará ahora al personaje a la gran pantalla. El actor aseguró que para preparar el papel su mayor reto fue "liberarse del histrionismo del teatro".

Según se explicó, en esta película hay "dos madres amadísimas", una representada por una imagen de la Virgen creada exclusivamente para la película, y otra interpretada por Gala Évora en su juventud, y Gloria de Jesús en la madurez.