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Reportaje:

Rivas busca sentido al ruido

El escritor presenta 'Os Grouchos', un libro con sus últimas columnas

"El periodismo y la literatura son el mismo oficio: dar a ver, luchar contra el silencio, porque peor que la mentira es el olvido". La edición de un libro basado en trabajos periodísticos, o escrito por un periodista, conlleva obligadamente el debate sobre semejanzas y diferencias. Manuel Rivas, más que reconocido en ambas facetas de la escritura, echó mano de su bagaje teórico sobre el asunto ayer en Santa Comba, en cuya librería Ler presentó Os Grouchos, una recopilación de, entre otros textos inéditos, de sus columnas publicadas bajo el mismo título en el suplemento Luces de la edición gallega de este periódico.

"El sentido del periodismo es la búsqueda del orden, ir a donde se producen fragmentaciones para ordenarlas, darle sentido al ruido", afirmó Rivas, que reivindicó la definición de "libro de los obreros" que le dio en su día Bertolt Brecht y que reconoció que le gustaría escribir "como andaba Charlot, provocando con su deambular libre que pasen cosas". En ese sentido cinematográfico, el escritor consideró que el cambio político en Galicia, fuera de otras interpretaciones, "sí que ha provocado una revolución óptica: el horizonte se ha ensanchado. Antes el pluralismo de los medios era únicamente territorial, en cada lugar mandaba uno".

"¿Quién va a venir a hablar a Santa Comba?", cuestionaba en voz alta un adolescente en el cibercafé anexo al local donde estaba convocado el acto. "No es algo anecdótico", había contestado teóricamente Rivas en la rueda de prensa previa a la presentación que demostraba en la práctica que sí hay quien se acerca a hablar a un pueblo como Santa Catalina de Armada, capital del término municipal de Santa Comba.

"Galicia es una confederación de comarcas atlánticas, como una confederación helvética. Hay que ir contra las grandes concentraciones masivas, y ligar los viejos ideales de la ilustración con las nuevas utopías del medioambiente, con la ecología", aseguró el autor de Os libros arden mal, que se declaró "tan emocionado como si fuese mi primera obra publicada", o como cuando, en la Feria del Libro del cercano Carballo, el pabellón anexo era el de un ferreiro que ofreció intercambiar una hoz por un libro.

Portada de Castelao

Rivas, después de explicar el título ("grouchos" es, además del nombre del mayor de los Hermanos Marx, un sinónimo de grolos, tragos) explicó también que la portada del libro editado por Xerais es un fragmento del cuadro A derradeira lección do mestre, una versión pictórica del célebre dibujo del álbum Atila en Galicia en el que unos niños velan el cadáver del que fue su profesor. La pintura está en el Centro Galicia de Buenos Aires, restaurada y expuesta después de décadas de años ocultada.

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