La Unión Europea y los inmigrantes
Escribo esta breve carta para expresar mi perplejidad y estupor ante la nueva directiva de emigración recientemente aprobada en Bruselas.
Hasta ahora creía que los derechos humanos eran para todos iguales, pero con esta nueva directiva, si has tenido la desgracia de nacer en un país pobre, tus derechos son menores que si lo has hecho en un país rico. Sólo por esta condición de pobre puedes ser privado de libertad y ser tratado como un delincuente.
Me gustaría que los políticos españoles que han dado su voto a esta aberración hagan un poco de memoria y recuerden que no hace tanto tiempo de aquí salía mucha gente, en la mayoría de los casos de forma ilegal, a otros países ricos. Y ahora promueven la criminalización de la pobreza, y por más eufemismos que usen seguirá siendo un encarcelamiento.- Paulo Xian Estévez. Barcelona.
Es un día triste y aciago. El Parlamento Europeo ha aprobado una directiva vergonzosa e indigna por la cual se permite privar de su libertad a una persona que no ha cometido delito alguno y retenerla en contra de su voluntad y sin orden judicial alguna durante 18 meses.
Para mayor escarnio, la tal directiva permite la deportación de estas personas, incluidos menores, a países que no son el suyo. Esto es un claro atentado contra los más elementales derechos de las personas, que son vulnerados y pisoteados. ¿Dónde está el tan cacareado Estado de derecho? ¿Dónde quedan las garantías individuales?¿Dónde está la Europa civilizada y defensora de los derechos humanos?
Como español me siento avergonzado e indignado de que nuestro Gobierno apoye semejante despropósito y me resulta especialmente sonrojante que los eurodiputados socialistas españoles, con la honrosa excepción del voto negativo del señor Borrell y con la abstención del señor Obiols, hayan votado tal indignidad. ¡Qué vergüenza! ¡Qué pena.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.