Buíde muestra su madurez en el Festival Mozart

Las matinés del Festival Mozart siguen su andadura. Ayer, con el estreno de Trazos. Diferencia, de Fernando Buíde (Santiago, 1980), obra encargo del evento patrocinado por Caixa Galicia. Buíde parte del trazo marcado en él por sus autores admirados, usando muy personalmente la forma variaciones (diferencias, según la denominación tradicional de la España del XVII). El objeto de la variación es aquí un clima más que de un tema, que Buíde varía en texturas y timbres, logrando hallazgos de empaste sonoro y color instrumental que muestran una madurez técnica superior a la que cabría esperar de su edad.

Hindemith escribió un cuarteto para la misma formación en 1938, tras huir de la Alemania nazi. Se trata de una obra raramente interpretada, cuyas características tímbricas y polifónicas fueron brillantemente ejecutados por el Grupo Instrumental Siglo XX, dirigido por Florian Vlashi, que engarzó los cantos de cada instrumento como en una diadema. En Contrastes, de Béla Bartók, destacaron la marcialidad irónica de Verbunkos (reclutamiento), la placidez de Piheno (descanso) y el virtuosismo de Sebes (rápido).