"Que nadie dude de nosotros"

Los puñales vuelan bien afilados en lo más alto de la Segunda División. Con el Numancia ya ascendido, Sporting, Real Sociedad y Málaga pelean por ocupar las otras dos plazas vacantes. El regreso a la élite del fútbol español -el cuadro asturiano no lo cata desde 1998- ha dado rienda suelta a las críticas más desatadas. Las más graves denuncian la compra de partidos a diestro y siniestro. "El Málaga primó al Sevilla Atlético para que nos ganara hace un mes, y también manejó al portero del Celta... ¡Lo que está pasando es una vergüenza!", afirman indignados en la Real Sociedad, donde a continuación reconocen que no pueden "demostrar el delito". También mantienen su inocencia: "Que nadie dude de nosotros. Tenemos las manos limpias, todo este alboroto es una campaña de desprestigio".

Un jugador del Salamanca reconoció "incentivos" tras empatar en Gijón

La respuesta de los demás equipos con aspiraciones de Primera no se deja esperar. "¡Serán canallas, cómo pueden poner en duda nuestro honor!", replican desde Málaga. "¡Pero si el Sporting y la Real Sociedad le ofrecieron 6.000 euros al filial del Sevilla cuando le tocó jugar con nosotros!", continúan. "¿Ah, sí?", se molestan en las oficinas de Anoeta. "Pues sabemos de muy primera mano que los andaluces ofrecieron 75.000 euros al Tenerife hace 15 días, y los asturianos otros 100.000 si perdíamos... La cifra la duplicarían al final de la temporada; dependería de si lograban o no el dichoso ascenso", continúan desde San Sebastián. "Por favor, seamos serios. Todo esto suena a las películas de la mafia siciliana", contesta un responsable del Sporting. "Eso habría sido indecente. ¡Si el club tiene una crisis gravísima! No creo que fueran capaces, más que nada porque los propios jugadores no cobraron todavía la nómina de abril", declaran en el entorno de un jugador del Málaga.

La polvareda la levantó hace dos semanas Dani López. El lateral del Salamanca reconoció hace tres jornadas, nada más empatar sin goles en El Molinón, que un tercer club les había prometido "incentivos" por la victoria, aunque no quiso desvelar el origen exacto ni la cantidad, que rondaba los 90.000 euros. El presidente del Málaga, Fernando Sanz no tardó en alentar la bronca: "El Málaga está libre de pecado. Las primas siempre han existido, pero no de una forma tan brutal y tan sucia". "Se está dando un empujoncito a la Real cada fin de semana", sentenció. El mandatario incluso acudió a la sede de la Federación en Las Rozas para presentar un dossier con documentos y recortes sobre la presunta compra de partidos.

"¿Y qué fue lo último que pasó? Que se cuestionó nuestro partido con el Salamanca. Decían que lo habíamos comprado. Pues menos mal, porque el empate no nos viene muy bien", cuenta Juan Manuel Lillo. El entrenador de la Real Sociedad se llevó el sábado un buen chasco. Delibasic adelantó a la escuadra donostiarra en el minuto 3, pero un cuarto de hora después Isaac aprovechó un mal despeje de Riesgo. "En cierto modo, así se zanjan los debates. ¡Anda que si llegamos a conseguirlo con el gol de Delibasic nada más empezar el partido!".

Manuel Preciado tampoco quiere dedicarle mucho tiempo a la bronca entre los directivos de cada equipo. "Los objetivos deben conseguirse en el campo. Me parecería mal si lo hiciera mi club. La verdad, no me gustaría enterarme de eso", zanja. El preparador del Sporting prefiere recordar la remontada contra el Córdoba: "Sufrimos como perros, pero el equipo puso su dosis de testiculina".