España es un embudo

El problema no es nuevo: al defender, la selección española se convierte en un embudo que lo chupa casi todo, hasta que aparece Casillas y salva el rancho del incendio. Cuando a Iker no le da por parar lo imparable, ocurre como en Belfast, en el segundo encuentro de clasificación para la Eurocopa: a los irlandeses les bastó con lanzar zurriagazos al área para que España se desmoronara.

Tres goles le cayeron aquella noche a Casillas, con Pablo y Puyol de centrales. No fue mejor con Juanito y Puyol ante Suecia, en Oslo; tampoco en Madrid contra Dinamarca, aunque ganara la roja, con Javi Navarro y Marchena en el eje defensivo.

Porque otra cosa no, pero Luis Aragonés, el seleccionador, le ha dado vueltas buscando solución. Por eso, ha probado siete parejas diferentes hasta quedarse con Puyol y Marchena, que no han cerrado la mejor temporada de sus vidas. Ni ellos, ni sus equipos, ni tampoco Juanito (Betis) o Albiol (Valencia).

"Defenderse bien es importante. Lo han demostrado Grecia e Italia", se quejó Luis

"Sergio Ramos sube tanto que se puede decir que jugamos con tres atrás"

El pasado sábado, ante Perú, jugaron Puyol y Marchena. Casillas, una vez más, salvó a España de algo peor. En toda la era de Luis no se recuerda un buen partido defensivo de España, más allá de Iker, que a menudo parecía que tuviera tres brazos. En Huelva contra Perú salvó por dos veces el empate, hasta que llegó tras una jugada estúpida. "Sí, una jugada tonta, pero una tontería como ésa nos puede echar de la Eurocopa. En Austria y Suiza no podemos cometer estos errores", escupió Luis, visiblemente contrariado por lo que entiende es un fallo imperdonable. Sucedió que Marchena y Casillas no se entendieron, que el andaluz perdió la pelota al intentar salir del área con el balón controlado y que Perú empató el partido. Después del encuentro, Capdevila reconoció: "No tiene la mayor trascendencia por tratarse de un amistoso pero no nos puede volver a ocurrir porque si no, lo pagaremos caro. Aun así, creo que estamos en el buen camino porque hemos tenido el balón, creado ocasiones y llevado el ritmo".

"Nos hemos acostumbrado tanto a tocar y a tocar que hasta tocamos dentro del área y eso no puede ser", insistió Luis Aragonés. "Se trata de asumir un principio de seguridad defensiva: si hay que despejar se despeja y punto, no podemos tocarla dentro del área".

Primero se lo dijo a sus hombres, en el vestuario después del encuentro -"llevaba un mosqueo...", reconoció un futbolista- y después a quien pudiera escucharle en la zona mixta del Nuevo Colombino de Huelva. "El equipo ataca bien porque atacan todos juntos. Por eso marcan goles los defensas. Lo que no puede ser es que de la defensa a la línea de medio campo dejemos tantos espacios. Defender es una responsabilidad general", razonó el técnico. "Empezamos a defender con Torres", insistió una y otra vez.

La mayor censura que le hizo a la defensa fue para los laterales: "No pueden subir a la vez. De hecho, Sergio Ramos sube tanto que se puede decir que jugamos con tres atrás. Eso es un riesgo, así que si sube él, Capdevila se tiene que quedar".

La estadística dice que a España le marcan pocos goles, pero también que Iker Casillas para muchos balones. "Defender bien es muy importante. Grecia ganó la última Eurocopa porque nadie defendió mejor que ella. Italia lleva cuatro Mundiales y defiende como nadie", recordó Luis.

Por lo pronto, ante Rusia, en el estreno de la roja en el Europeo, el próximo día 10, volverán a jugar juntos Marchena y Puyol en el eje. Para Luis, es la pareja de centrales intocable. Y es que, sorprendentemente, el fútbol español sufre en la actualidad una sequía de centrales.

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