Las obras de la estación de la Sagrera empezarán en 2009
Las obras de la caja de la estación de la Sagrera de Barcelona se licitarán en otoño para que puedan empezar en 2009, con un presupuesto de 457 millones de euros, según manifestó ayer el cuarto teniente de alcalde de Urbanismo, Infraestructuras y Vivienda del Ayuntamiento de Barcelona, Ramon García-Bragado. Los trabajos de la caja -las vías y los vestíbulos- durarán dos años y medio, por lo que podrían terminar alrededor de 2012. Se prevé que pasen por la estación 95 millones de pasajeros al año. En caso de que las obras de la línea del AVE entre Barcelona y la frontera francesa hubieran terminado antes de que estuviera lista la caja de la estación, los trenes pasarían por Sagrera sin pararse, aseguró García-Bragado, quien afirmó que ya dispone del proyecto, lo que significa una "concreción desde el punto de vista geométrico y funcional de la estación". El proyecto, al que le faltan algunos detalles, lo está ultimando la empresa Barcelona Sagrera Alta Velocidad -participada por el Ayuntamiento, la Generalitat y Fomento-, y aún falta que lo apruebe el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), que podría hacerlo en las próximas semanas, para que en julio se pueda licitar.
García-Bragado recordó que hasta que no esté finalizada la caja, no se puede construir la parte superior, donde las administraciones siguen negociando la planificación de los hoteles y la zona comercial y de oficinas. Este es el punto que preocupa de forma especial al Consistorio ante la opinión manifestada por Fomento de que ahora con la crisis económica que atraviesan los sectores de la construcción y financiero no es buena época para emprender promociones importantes, como lo será la de la Sagrera. La planificación de las administraciones partía del aprovechamiento de los beneficios de edificabilidad de hoteles y oficinas para financiar el coste de las obras junto con los presupuestos de Adif. La estructura de la estación tendrá dos niveles. Uno para el AVE, cuyos andenes serán largos porque podrán parar trenes de hasta 400 metros de largo, y un segundo para los de Cercanías con andenes más cortos, informó ayer El Periódico de Catalunya.
