Olivas pide prudencia a los consejeros de Bancaja

El presidente de Bancaja, José Luis Olivas, pidió ayer prudencia a los consejeros generales durante la asamblea general del grupo, realizada en Castellón. Tras una breve descripción de la situación económica actual, les pidió que fueran prudentes en sus previsiones y moderados en sus augurios. "Y, en todo caso, juzgar del modo más rigurosamente objetivo los datos relevantes y fidedignos de la situación, más que las profecías y vaticinios que nos envuelven, tanto si nos inquietan más de la cuenta, como si minimizan los riesgos de la situación", señaló.

Olivas subrayó la "gran fortaleza" de Bancaja, así como los resultados obtenidos en 2007, que ayer fueron ratificados por la asamblea general y que supusieron unos 490 millones de euros netos. "Bancaja está en muy buenas condiciones de crecimiento, eficiencia, rentabilidad y solvencia para afrontar éste y los próximos ejercicios, como así lo acredita la posición como sexto grupo financiero y tercera caja de ahorros de España", celebró.

Menor crecimiento

Aun así, destacó que había que "estar atentos" a una situación de incertidumbre como la actual y estar preparados para "un menor crecimiento, que será moderado en la inversión crediticia". Del mismo modo, previno sobre "una mayor dificultad en los mercados mayoristas para colocar activos, que desplazará el eje de financiación a los depósitos de los clientes", y requirió "tener una atención especial a la calidad de las inversiones para asegurar su retorno".

El director general de la entidad, Aurelio Izquierdo, fijó las líneas generales para 2008. Entre otros objetivos, enumeró el de incrementar y fidelizar la base de clientes y mejorar la capacidad comercial, así como el de primar la gestión de particulares frente a las grandes operaciones. Izquierdo también se refirió a la necesidad de ajustar la gestión de los precios y contener los gastos para poder mantener los niveles de eficiencia y mejorar las ratios de rentabilidad.

El director general explicó los resultados del primer trimestre de 2008, que supusieron unos beneficios de 114 millones (un 15,1% más que el año anterior). Asimismo destacó "el fuerte incremento" de los recursos propios computables, que han alcanzado los 1.441 millones. Por otra parte, Bancaja renovó a Deloitte por un año más como auditora de cuentas.