El 'tour' penitenciario de Roca
El cerebro del 'caso Malaya', agotado tras pasar por cuatro cárceles en cinco días
Nunca el trayecto desde Soto del Real a Marbella fue tan complicado. Los protocolos de traslado de presos de la Guardia Civil han hecho que el máximo imputado del caso Malaya -en prision preventiva por el caso Saqueo desde finales de abril- cubra los 630 kilómetros que separan la prisión madrileña de los juzgados de Marbella en cinco días, en lugar de las siete u ocho horas de un trayecto normal.
Roca ha necesitado de cinco jornadas para recorrer 630 kilómetros
El viaje, al que su abogado, Aníbal Álvarez calificó irónicamente como un "tour turístico por las prisiones", ha hecho que el ex asesor de Urbanismo hiciera noche en tres centros penitenciarios que le eran desconocidos: Navalcarnero, Valdemoro y Jaén. Todo ello, para acudir a una declaración ante el juez Óscar Pérez, instructor del caso de corrupción marbellí, que no pudo celebrarse precisamente porque Roca estaba exhausto y no había podido preparar la comparecencia con su abogado, ya que estuvo incomunicado durante todos los días del viaje.
El supuesto cerebro de la trama corrupta regresó ayer a Marbella después de 20 días, el tiempo que lleva en prisión preventiva por un caso de desvío de fondos del Ayuntamiento marbellí, en manos de la Audiencia Nacional. Bajó del furgón de la Guardia Civil a las 9.00 y cruzó el acceso a los calabozos esposado. Además del maletín habitual -con la documentación con la que prepara sus declaraciones- llevaba un portatrajes. Ya en la sede judicial, cambió su camisa beige por otra blanca, a la que añadió una americana azul y una corbata granate. Fue conducido a la planta del juzgado número cinco, donde esperó su turno sin esposas y en compañía de su hija, María Roca. La joven, también procesada en la causa, suele aprovechar las visitas de su padre al juzgado para verle y hablar durante las esperas.
La cita de Roca ayer en los juzgados cerraba una etapa de la instrucción del caso Malaya. Como máximo imputado en la trama de corrupción marbellí será el último de los 86 procesados en prestar declaración indagatoria, un trámite tras el que el magistrado cerrará el sumario del caso y en el que el acusado puede modificar o matizar declaraciones anteriores. Los propios abogados de Roca calculaban que la declaración iría para largo. Su apellido aparece en el auto de procesamiento en 2.770 ocasiones. De hecho, pensaban que se prolongaría al menos dos jornadas, ya que una treintena de abogados de otros acusados querían preguntarle sobre las imputaciones de sus clientes. Todos tendrán que esperar al 29 de mayo, la nueva fecha fijada por el juzgado porque Roca, de 54 años, estaba agotado.
El juez Óscar Pérez, que le dejó en libertad el 14 de abril después de que pagara un millón de euros, acordó suspender la comparecencia. El fiscal anticorrupción, Juan Carlos López Caballero, no se opuso. "Está agotado física y psicológicamente. No puede someterse a una declaración de este tipo", dijo su abogado, José Aníbal Álvarez, al salir de los juzgados. Minutos antes del mediodía, el sonido de la puerta corredera del furgón policial alertaba que el ex asesor urbanístico abandonaba los juzgados.
La nueva prisión preventiva de Roca, solicitada por el Ayuntamiento de Marbella y acordada por el magistrado Pablo Ruz, ha dificultado enormemente sus frecuentes comparecencias en los juzgados. Aunque está destinado en la cárcel de Soto del Real, ya que el caso Saqueo 1 se instruye en Madrid y es la prisión más cercana, el ex asesor de Urbanismo tendrá que permanecer temporalmente en un centro penitenciario más cercano a Málaga. Todavía no se ha confirmado si regresará a Albolote (Granada), donde cumplió gran parte de los dos años de prisión preventiva por el caso Malaya, o se quedará en Alhaurín de la Torre.
Además de la declaración del 29 de mayo, el ex asesor de Urbanismo tiene que declarar en Marbella el 27 de mayo, y el 9 y 10 de junio. Está citado por dos piezas separadas del caso Malaya. En la primera está acusado de un delito fiscal y en la segunda, en la que también están imputados los ex alcaldes Julián Muñoz y Marisol Yagüe, se investigan dos operaciones urbanísticas.
Garantía hipotecaria para la fianza
De la mayor de las desesperaciones a los intentos por conseguir una garantía hipotecaria. Una vez superado el susto, por el que el pasado 23 de abril Juan Antonio Roca se vio obligado a regresar a la cárcel, esta vez por el caso Saqueo 1, sus abogados vuelven a plantearse la posibilidad de reunir los tres millones de euros que el magistrado de la Audiencia Nacional Pablo Ruz reclamó para volver a dejarle en libertad. Como el ex asesor de Urbanismo ya abonó 450.000 euros de fianza por este procedimiento -fue en 2002 y tardó 24 horas en hacerlo- podrá descontar la cifra a los tres millones.
Aún así, tendrá que aportar 2,55 millones, una cantidad que sigue siendo muy alta. Aunque en los primeros días, la defensa de Roca consideraba prácticamente imposible hacer efectiva la fianza, ayer avanzó, sin dar muchos más detalles, que "están intentando conseguir una garantía hipotecaria". En este caso tendrían que recurrir a entidades bancarias que aporten el dinero, con una serie de bienes como aval. Roca, a quien se le reconoce un patrimonio de 200 millones de euros, tiene numerosas sociedades y bienes bajo administración judicial.
Fue el Ayuntamento de Marbella, personado en el caso Saqueo, quien solicitó al juez la prisión preventiva para Roca. El magistrado tomó la decisión atendiendo al riesgo de fuga y la cercanía del juicio por esta causa, en la que Roca se enfrenta a una pena de 10 años de prisión. El caso investiga un desvío de 26,7 millones de euros del Ayuntamiento de Marbella a empresas privadas entre 1991 y 1995.
El día en que Roca volvió a la cárcel apenas había tenido tiempo de disfrutar de su recién recuperada libertad. Hacía poco más de una semana que había pagado un millón de euros para abandonar la prisión preventiva por el caso Malaya. Sus familiares y abogados tardaron más de dos semanas en reunir la suma requerida por el juez Óscar Pérez, titular del juzgado número 5 de Marbella. Abrieron varias cuentas bancarias, en las que una veintena de personas aportaron fondos, investigados después por la policía a petición del propio juez. Su puesta en libertad, recurrida por el fiscal y las acusaciones, causó un gran revuelo. Más de 2.000 vecinos de Marbella salieron a la calle para protestar y se declaró al ex asesor de Urbanismo marbellí persona no grata en la ciudad. Hoy, la Audiencia Provincial revisa la decisión del magistrado Pérez.
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