Sin "matices" en financiación autonómica

La Xunta defenderá una única posición en el debate en torno a la reforma de la financiación autonómica a pesar de las diferencias de criterio expresadas por el BNG. Así lo explicó ayer el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, después del Consello de Gobierno que ayer analizó un informe elaborado por el conselleiro de Economía, José Ramón Fernández Antonio.

"Yo hablo en nombre del presidente de la Xunta, como es obvio, no del presidente de un partido", precisó Touriño. "Aquí hay y habrá una posición de Gobierno" y "los matices que muy legítimamente pueda tener toda fuerza política", añadió en referencia a las discrepancias expresadas por el Bloque, "están ahí, forman parte del necesario diálogo, y por eso el conselleiro va a escuchar a los tres grupos parlamentarios". No obstante, insistió, "la negociación que vamos a emprender en el Consello de Política Fiscal y Financiera la comparte todo el Gobierno" de forma "unánime".

El propio Anxo Quintana confirmó la unidad de acción del Ejecutivo en relación con este asunto. La posición del Gobierno, afirmó, es la expresada por el conselleiro de Economía y el propio presidente. Y si él mismo tiene algo que decir al respecto lo hace en el Consello de la Xunta, cuyas deliberaciones, recordó, "son secretas".

Touriño sí advirtió al Bloque, partidario de otro modelo, que "en aras de principios" Galicia no puede permitirse "condenar a los gallegos a tener menos derechos y menos niveles de prestación de servicios que cualquier otro ciudadano del Estado". "Cataluña", subrayó, "plantea un modelo diametralmente opuesto al de Galicia y estoy seguro de que tendrá que modificarse". "No podemos admitirlo: la financiación tiene que dar cobertura al 100% del coste de los servicios", subrayó.

El presidente recordó los términos en los que Galicia plantea la negociación, ya adelantados por el conselleiro de Economía. La propuesta gallega parte de la infravaloración de recursos establecida en el modelo anterior y trata de convencer a las demás comunidades autónomas de la conveniencia de adoptar el criterio de ajustar las cuantías a las necesidades de gasto de los usuarios, no a la población. Porque atender a una persona de 70 años, recordó, cuesta 3,4 veces más que a una de 40.

Galicia, añadió Touriño, aspira también a que el modelo tenga en cuenta la inversión pendiente en infraestructuras.