La teja gallega cruza el Atlántico
El parón inmobiliario empuja a Cerámicas Verea hacia el mercado americano
Los tiempos de desaceleración económica en los que nos encontramos suponen riesgos pero también oportunidades para las empresas. Los responsables de Cerámicas Verea, la empresa líder de producción de teja curva en la Península Ibérica, han preferido ver la botella medio llena y, han decidido aprovechar la amenaza del parón en el sector inmobiliario español para explorar nuevos mercados y vías de negocio. En un contexto de crisis, sus planes de expansión ensancharon los mapas con el objetivo de colocar sus productos en el exigente mercado estadounidense y ahora el sueño está a punto de cumplirse, ya que la empresa ha obtenido la certificación definitiva que le permitirá introducirse en el mercado de Florida, el estado que tiene la normativa sobre importaciones más exigente y que le abre a Cerámicas Verea de par en par las puertas al resto del gigante norteamericano.
El gerente de la compañía, Luis Verea, explica que en Estados Unidos se encontrarán con la competencia de empresas de Portugal y Venezuela, país este último a donde también han llegado ya los productos de la empresa ubicada en el municipio coruñés de Mesía.
La apuesta por la internacionalización de Cerámicas Verea coincide con el lanzamiento de su última novedad, la teja Verea S, que destaca por su fácil montaje y por su adaptación a distintos soportes (chapa metálica, onduline bajo teja o placa de fibrocemento). Este tipo de material se puede colocar en cualquier tipo de superficie (incluso sobre un plano vertical), es más ligera y económica que sus predecesoras y su vida útil se prolonga más allá de los 35 años.
Cerámicas Verea ha puesto en marcha una nueva línea de producción para este innovador tipo de cubierta, con capacidad para fabricar 13,5 millones de unidades al año. La empresa lidera actualmente la producción de teja curva en el mercado español con 67 millones de unidades cada ejercicio.
Verea admite que la empresa ya ha comenzado a notar los efectos de la crisis inmobiliaria aunque también advierte que de momento cuenta con un colchón que le permite suavizar los efectos de la desaceleración de la nueva construcción, dado que el 40% de su volumen de negocio actual se centra en las rehabilitaciones y reposición de tejas viejas. "Tenemos buenas expectativas para vender en Estados Unidos. Contamos con pedidos en firme para Florida y mantenemos contactos con empresas de otros estados como Carolina del Norte, Nuevo México, Texas o Nueva York".
Pese a las buenas perspectivas de futuro, Luis Verea se muestra preocupado por la fortaleza del euro frente al dólar y su repercusión sobre las exportaciones en los balances de final de año. "Sólo nos preocupa que siga bajando la cotización del dólar respecto al euro porque puede llegar a suponer un problema", señala el gerente.
Pero la búsqueda de nuevas vías de negocio no se queda ahí. La empresa ha patentado, tras año y medio de pruebas, un sistema universal para el montaje de cubiertas único en España. "El futuro no pasa sólo por fabricar tejas sino también por colocarlas porque se trata de una actividad que crea valor añadido para la compañía", indica Verea. El nuevo sistema, en el que han invertido 100.000 euros, permitirá a la empresa coruñesa cerrar el ciclo de producción.
Cerámicas Verea tiene 35 años de vida y cuenta con una facturación de 8 millones de euros anuales y una plantilla de 48 trabajadores. Pese a que estas cifras pueden parecer modestas la compañía ha destinado en los últimos ocho años cerca de 25 millones a inversión en I+D. "Tenemos uno de los mejores laboratorios de España y estamos presentes en dos proyectos de investigación con la universidad y la Unión Europea", explica Verea.
Ejemplos como el de esta empresa confirman que la apuesta por la investigación en el sector privado acaba por dar sus frutos y pueden dar paso a la elaboración de productos que son capaces de cumplir los requisitos de los países más avanzados.
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