Cuatro jóvenes mueren tras una fiesta

La localidad de Brenes (12.000 habitantes) se despertó ayer en estado de shock. Cuatro jóvenes del municipio, a 20 kilómetros de Sevilla, se dejaron la vida en la carretera que une el pueblo con la capital después de que el coche en el que viajaban de madrugada se empotrara de frente contra un camión. Sólo se salvaron los conductores de los dos vehículos. El del turismo resultó herido grave y el del camión, leve.

Varias horas después del siniestro permanecía en el lugar del accidente el reloj de una de las víctimas. Se había quedado parado a las 2.40, la hora en la que se produjo el choque. Tres de los cuatro jóvenes fallecidos eran primos. Tenían 18, 19 y 21 años. El cuarto, también de 21, era un amigo común, igual que el conductor del coche, que fue el único ocupante del vehículo que sobrevivió. Está ingresado en el hospital Virgen Macarena en estado grave, pero fuera de peligro, según fuentes sanitarias.

Los jóvenes habían pasado el día celebrando una primera comunión, según contaban ayer familiares y amigos de las víctimas a las puertas del Instituto Anatómico Forense de Sevilla. Según el relato que los amigos acertaban a hacer entre lágrimas, la fiesta se alargó y se fueron a cenar algo. Después, algunos se retiraron a dormir y otros siguieron un rato más.

El accidente se produjo en la carretera A-8008, a la altura de la pedanía de El Gordillo. Según fuentes de la Dirección General de Tráfico, el impacto se produjo cuando el conductor del turismo perdió el control del coche e invadió el carril contrario, por el que transcurría el camión contra el que chocaron. El Ayuntamiento de Brenes decidió ayer suspender las fiestas de las cruces de mayo que se celebraban estos días.

Por otra parte, un matrimonio residente en la localidad guipuzcoana de Legazpia murió ayer por la tarde después de que su turismo chocara contra un camión en la carretera A-1 en el término municipal de Alsasua.