Mueren 70 personas al chocar dos trenes en China por un fallo humano
La vía iba a ser destinada sólo a convoyes de mercancías antes de los Juegos
China vivió ayer el peor accidente ferroviario de la última década. Un total de 70 personas fallecieron en la provincia costera de Shandong, cuando un tren de pasajeros descarriló y chocó contra otro que venía de frente, poco antes del amanecer. Más de 400 personas resultaron heridas, 70 de ellas, graves. El desastre, cerca de la ciudad de Zibo, fue causado por un error humano, según las autoridades, que no dieron más detalles. Otras informaciones aseguraron que había sido debido a "una negligencia".
Uno de los trenes iba a Qingdao, sede de la competición de vela en Pekín 2008
"Al volcar el vagón me cayó mucha gente encima", relataba un viajero
El primer convoy, que se dirigía de Pekín a Qingdao (ciudad sede de las competiciones de vela durante los Juegos Olímpicos del próximo agosto), se salió de la vía e impactó contra el segundo, que viajaba de Yantai (también provincia de Shandong) a Xuzhou (Jiangsu). Eran las 4.41 de la mañana (seis horas menos en la España peninsular). Nueve de los coches del primer tren cayeron a la cuneta, mientras que los vagones del otro permanecieron de pie a pesar de haber descarrilado. Entre los heridos hay cuatro ciudadanos franceses, tres de ellos miembros de una misma familia.
"De repente, sentí que el tren, como si fuera una montaña rusa, se volcaba noventa grados hacia un lado y luego hacia el otro. Cuando, al final, se salió de las vías, me cayó mucha gente encima", explicó un pasajero llamado Zhang, según la agencia oficial Xinhua.
"Estábamos durmiendo todavía cuando ocurrió el accidente", contó una pasajera llamada Yu. "Me desperté de pronto, cuando sentí que el tren se detenía con una sacudida. Después de un minuto o dos, se puso en marcha de nuevo y volcó". La mujer, de 38 años, logró escapar de la chatarra con su hija de 13 años, a través de una grieta enorme en el suelo del vagón.
Xinhua describió escenas de caos minutos después del desastre, sábanas empapadas de sangre y termos de agua para el té rotos por todos lados, y gente que intentaba ponerse a salvo. "Vi a una chica que quería ayudar a su novio a salir del vagón, pero estaba muerto", dijo Zhang, quien también contó cómo algunos campesinos de la zona utilizaron sus herramientas de labranza para romper los cristales de las ventanas y extraer a los supervivientes.
Entre los heridos se encuentra uno de los entrenadores del equipo nacional de vela chino. Más de 700 miembros de los servicios sanitarios y 130 ambulancias participaron en las labores de rescate.
La televisión estatal aseguró que la línea en la que ocurrió el descarrilamiento fue construida en 1897, e iba a pasar a ser utilizada únicamente por trenes de mercancías cuando entre en funcionamiento la nueva conexión ferroviaria rápida entre Pekín y Qingdao, antes de que comiencen los Juegos.
Se trata del segundo accidente grave que ocurre en Shandong este año. En enero, 18 personas fallecieron cuando un tren que circulaba a 120 kilómetros por hora arrolló, en medio de la noche, a un grupo de operarios que estaba realizando labores de mantenimiento.
En 1997, 126 personas murieron y 200 resultaron heridas en un choque de convoyes en la provincia central de Hunan. El tren es el medio de transporte más popular en China, país en el que el ferrocarril cuenta con un ministerio. El año pasado fue utilizado por 1.360 millones de pasajeros.
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