Inmopoli cierra en positivo, pese a la falta de liquidez

Por grande o pequeña que sea la feria inmobiliaria, este año la crisis que sufre el sector y las dificultades de los ciudadanos para encontrar financiación en las entidades financieras para adquirir sus viviendas se refleja claramente en la oferta. En la feria Inmopoli, que se ha celebrado este fin de semana en Alicante, los quince expositores han redoblado su esfuerzo para estimular el interés de los clientes con ofertas.

No obstante, y pese al adverso clima financiero, la organización presentó un balance positivo de la feria, visitada por 3.500 personas. Durante las tres jornadas de feria, se cerraron más de 100 operaciones de compra de casas y se establecieron 2.000 contactos comerciales. "En esta nueva edición y pese a la situación actual se ha corroborado que existe una importante demanda dispuesta a adquirir su vivienda y que eventos como éste les ayudan a perfilar sus necesidades. De hecho, repetiremos la feria el próximo octubre", señaló ayer Rafael Soler, director de Markmedia Globa, firma organizadora del evento.

Para captar a los indecisosclientes, las promotoras han exprimido al máximo los recursos de la ley de la oferta y la demanda. Así, CBC Promotores Inmobiliarios, firma con la sede en Elda, ofrece descuentos de hasta 50.000 euros en sus viviendas más caras. Sus responsables explican que "la gente quiere comprar" pero a renglón seguido admiten la existencia de una "sensación de miedo por la subida del Euribor y la falta de financiación". Los tiempos han cambiado, las casas se venden ahora a pie de obra, ya no sobre plano como en los últimos años y aunque la vivienda de primera necesidad sigue teniendo demanda de "reposición" (la que se realiza tras vender la casa habitual) "ahora se convierte en un lujo y por tanto es prescindible a corto plazo", explican en la empresa.

El ingenio se agudiza en tiempos de crisis para un sector que ha dejado de simplemente despachar género a tener que ponerse a vender. El Grupo Murcia Puchades, por ejemplo, ofertaba a las diez primeras personas que en la feria reservaran una vivienda en una promoción en la playa de San Juan (previo adelanto de 3.000 euros) no pagar la hipoteca durante los dos primeros años. El registro, la notaría y la gestoría en el impuesto del acto jurídico documentado corren también de su cuenta. Todo ello puede suponer un ahorro al comprador de entre 1.000 y 1.500 euros.