El grupo vasco Ingenor abre una ingeniería filial en China
Hace obra civil y busca clientes españoles en el gigante asiático
Ingenor nació en 2001, factura siete millones de euros, de los que un 15% van a beneficios, tiene 135 trabajadores y planes ambiciosos de crecimiento. Es una ingeniería media, pero ha hecho una apuesta singular. Se ha convertido en la primera firma española de su sector que ha montado una filial en China, una sociedad 100% de capital propio. "No había nadie, pero se instalaban un montón de empresas españolas y decidimos ir", asegura Ignacio Olabarri, su presidente y principal accionista.
En la filial de Shanghai cuentan con 14 personas de las que 3 son españolas (un becario y dos ingenieros) y 11 son chinos (ingenieros y arquitectos). "El principal problema es la comunicación, pero los buenos ingenieros tienen un nivel similar al de los españoles", dice Olabarri. De momento la facturación en China es baja, unos 300.000 euros, pero las perspectivas son muy favorables. Están en varios concursos que les pueden llevar a abrir una nueva oficina en Tanjin. El más relevante es la construcción de una ciudad nueva promovida por un grupo israelí. Se halla en la fase final. Mientras se consolidan los nuevos planes en China trabajan en proyectos locales y en los que subcontratan desde las oficinas en España.
Está ampliando un polígono de MCC en Shanghai y un parque de Eurochina
El primer trabajo en China se lo subcontrató un arquitecto español, después llegaron las constructoras y las empresas. Después llegaron tres pedidos de Mondragón Corporación Cooperativa para la ampliación de su polígono industrial en Shanghai y un parque tecnológico para Eurochina Investment.
Olabarri, padre de la empresa, es ingeniero y ha trabajado en Arcelor y en Idom. En 2000, con el apoyo de su familia, decidió montar Ingenor, de la que posee el 95% del capital. El resto está repartido entre los principales directivos de la empresa. Asegura que mantienen ritmos de crecimiento del 20% y que están libres del parón inmobiliario porque solamente el 5% de sus proyectos están ligados a vivienda y todos son de obras ganadas en concursos públicos. El negocio se reparte entre un 70% en negocios privados y un 20% en obra civil.
El objetivo de la empresa es facturar 20 millones de euros en 10 años, lo que supondría contar con una plantilla de cerca de 400 ingenieros. -
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