Buen se asegura la línea del PSE al situar a Arriola como relevo

La línea política de los socialistas guipuzcoanos tiene asegurada su continuidad a pesar del relevo de su actual secretario general, el diputado Miguel Buen. A partir del próximo 17 de mayo, el actual alcalde de Eibar, Iñaki Arriola será el nuevo líder del PSE-EE de Guipúzcoa. Este militante socialista, nacido hace 48 años en la villa en la que ha realizado toda su carrera política, está estrechamente ligado a la actual estructura interna del partido y dispone también de la máxima confianza de la Ejecutiva del País Vasco, en la que ocupa una secretaría.

En las pasadas elecciones locales, Arriola revalidó la mayoría absoluta de que disponía desde la anterior legislatura. Con sus once concejales dirige la difícil transformación urbanística de Eibar, una villa consecuencia directa de la inmigración a partir de los años cincuenta. Además, el futuro responsable del socialismo guipuzcoano, un abogado, casado y con dos hijos, se estrenó como concejal en el año 1983 en el Ayuntamiento eibarrés que entonces dominaba el peneuvista Jesús María Aguirre, tras haberse impuesto en las elecciones a la lista del PSE-EE que lideraba José Fernández, ahora ya retirado de la vida política vasca.

La opción de Arriola ha formado parte de un cuadro de movimientos dentro de los socialistas guipuzcoanos. En él se inscribe la renuncia a posiciones de candidato al Congreso del veterano Manuel Huertas, que ha dispuesto de una lista a miembro de la asamblea de Kutxa; a su vez, su sustitución por el propio Miguel Buen, tradicional cartel del PSE-EE en las elecciones forales y que, precisamente, va a mantener su condición de juntero tras haber obtenido el acta de diputado en Cortes donde, además, dirigirá el grupo de cargos vascos en las dos Cámaras. Con la elección de Arriola, las expectativas sobre el futuro de José Antonio Santano, alcalde de Irún también con mayoría absoluta, quedan desvanecidas.