Futbolista universal
Cristiano Ronaldo, extremo del Manchester, transforma las críticas en elogios al mejorar cada curso sus registros
Aunque ya nadie se atreve a descalificarlo, no siempre fue así. En sus inicios en la Premier, muchos se mofaron de él, más atento a la estética del juego que a su practicidad. Para Cristiano Ronaldo (Portugal; 1985) todo empeoró en 2006, cuando no sólo murió su padre y fue acusado de una violación que se probó falsa, sino que en los cuartos de final del Mundial de Alemania reclamó y logró una tarjeta roja para Rooney, para, de paso, poner a Inglaterra de uñas. "Debe jugar bien para que el tiempo borre lo sucedido", advirtió Ferguson. Lo suyo costó; le robaron en su casa y agredieron a su sobrina. "Cualquiera se hubiese desmoronado", dice su compañero Rio Ferdinand; "pero se rebeló y demostró que quería ser uno de los mejores". Acorde a sus galardones -Trofeo Bravo al mejor joven (2004), deportista del año en Portugal (2006 y 2007), mejor de la Premier, Balón de Plata y tercero en el FIFA World Player (2007)- y por mucho que los aficionados se resistan a admitirlo, Ronny siempre ha mejorado sus registros al tiempo que ha transformado las críticas en elogios. "Es el mejor", concluye Rooney. Ambos visitan el miércoles el Camp Nou en la ida de las semifinales de la Liga de Campeones.
- Imita regates de 'YouTube'. Se pirra por los malabares con la pelota. Así, no es raro que se pase las tardes descargando vídeos de YouTube para imitarlos. Hace cuatro años, sin embargo, los rivales del United veían sus triquiñuelas como una pérdida de tiempo y le bautizaron Pony, por sus galopadas y movimientos trotones. "No muestra madurez ni respeto", aseguró Mourinho. "Creía que sus movimientos eran una falta de consideración. Pero es su forma de jugar", replica Marcello Lippi, ex seleccionador de Italia. Para Ferguson todo se reduce a una frase: "Antes se perdía en los regates; ahora resuelve partidos".
- Supera el récord de Best. Desde el legendario George Best, que deslumbró por su velocidad y sus quiebros desde 1963 a 1974, ningún extremo del United había alcanzado la cifra de 32 goles -Best lo hizo en 1968-. En este curso, Ronny suma 38 y está a cuatro del récord del club, de Dennis Law (1964). Una marca brillante si se atiende a que el mejor registro de Rooney se fija en 18 goles; y que el de Van Nistelrooy era de 36. "Es un orgullo batir récords", reconoce el luso; "quiero ser recordado por marcar una época en el United".
- Un pistolero a balón parado. Cuando llegó a Old Trafford, había una broma recurrente entre los más críticos del United. "¡Al suelo!", soltaban irónicos, dando a entender que su integridad física corría peligro cuando lanzaba una falta. Ahora, todos alaban su técnica. "Postura de pistolero, resoplido y golpeo fuerte", describe Carrick, medio centro del United. Este año, ha marcado cinco dianas en esta suerte. "Está alcanzando la perfección", desvela su compañero O'Shea; "cuando chuta, los porteros nunca saben hacía dónde irá el balón". Ahora, cuando hay una falta, las gradas de Old Trafford siempre le dedican su canción: "One only one Ronaldo" .
- Resolutivo y completo. Sus goles de esta temporada le definen: 13 con la pierna derecha, 7 con la izquierda, 8 con la cabeza, 5 de falta y 5 de penalti. Pero tras perder el año pasado ante el Milan en las semifinales de la Champions, los rivales aseguraron que se diluía en las grandes citas. Hace poco, sin embargo, se encargó de eliminar en los cuartos al Roma con un golazo de cabeza. "Cuando el partido se complica, siempre le buscamos", incide Carrick. El extremo responde: 16 tantos en los primeros tiempos; 22, en los segundos. Y de ellos, 12 los ha marcado en el último cuarto de hora. O, lo que es lo mismo, el 31% de sus dianas.
- Cobra 6,4 millones al año. "Corre tan rápido con la pelota como sin ella. Eso lo hacía Maradona", convino Ferguson. Ahora, Nike promociona sus botas enfrentándole a un Bugatti en un sprint. Pero no es la única marca que le llena los bolsillos; tiene contratos con Coca-cola, Pepe Jeans, Banco Espíritu Santo, y fue portada, junto a Buffon, del juego Pro Evolution Soccer. Los últimos estudios determinan que su imagen es la que mayor valor mediático tiene, por encima de Rooney, Ronaldinho, Messi y Beckham. Eso se reproduce en su sueldo; es el segundo mejor pagado (6,4 millones por curso) del United, después de Rooney. "Habrá que revisarle el contrato", avisa ya Ferguson.
Bromista y presumido
Novio de una mallorquina, al portugués le asiste su primo en el hogar
Hace dos semanas, se marchó al banderín del córner y se marcó su bailecito. Pelota por delante, piernas por detrás; cuero para un lado, cuerpo para el otro... Hasta que Gallas, del Arsenal, tan irritado como turbado, le pegó una patada de arrea. Acto seguido, cuando se levantaba con una sonrisa en la cara, Cesc Fábregas le recriminó su actitud chulesca. El Manchester United ganaba por 2-1 en Old Trafford y era la penúltima jugada del partido. Momento idóneo para el baile de Cristiano Ronaldo, que se estudia cada paso, cada malabar, durante horas. Ese es Ronny -como le conocen en el vestuario-, absolutamente profesional y descaradamente bromista.No hace mucho, Cristiano Ronaldo se quedó ensayando unas faltas después del entrenamiento al tiempo que sus compañeros enfilaban el vestuario. Cuando se cansó de golpear al balón, observó que los conos estaban todavía en el césped. Puñetero, no se le ocurrió otra cosa que ponerlos todos sobre el coche de Anderson, que se llevó una sorpresa y el cachondeo del resto, advertidos después de que Ronaldo lo hubiera susurrado mientras se duchaba. Bromista por naturaleza, sus trastadas son constantes. Así, el día que no mete a alguien en el cubo de la ropa a la fuerza o se esconde él para dar un susto, se dedica a recortar fotos en los periódicos de gente parecida a sus compañeros y las cuelga en las taquillas correspondientes. Los demás jugadores del United recogen el testigo y le imitan hablando inglés un tanto macarrónico y exagerado. Pero Ronny tiene ases en la manga y siempre se venga con su juego favorito; consiste en dar dos toques al balón sin que se caiga, pero con la gracia de que el segundo puede ser un pase molesto que dificulte al otro el control del cuero.A Cristiano Ronaldo le gusta tanto reír como cuidarse. No sólo fomenta el cachondeo y suda de lo lindo cuando baila el reggaeton en el vestuario, sino que, presumido, se pasa largos ratos delante del espejo, comprando ropa a la última moda -"es el que mejor viste", confiesa Ferdinand- y bronceándose en los rayos UVA. Para moverse en su Porsche o Bentley, sin embargo, casi siempre le lleva su primo, quien vive con él y se encarga de cocinarle y llevarle todos los asuntos del hogar. Estable con su novia de Mallorca, Ronny también destaca por ser amable y generoso; a Anderson y Nani, por ejemplo, los dejó vivir a principios de curso en su casa hasta que encontraron su propio piso. Pase lo que pase, se divierte dentro y fuera del campo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.