_
_
_
_

La situación de la Fiscalía de Alicante es "penosa e intolerable"

La Inspección de la Fiscalía General denuncia la precariedad de medios

La situación de la Fiscalía de Alicante, en el apartado de instalaciones y recursos materiales y humanos, es, en general, "penosa", e "intolerable e indigna" en los casos particulares de los destacamentos de los partidos judiciales de Torrevieja y Alcoi. El contundente diagnóstico sobre la precariedad de las dotaciones del ministerio público en Alicante se recoge en el último informe de la Inspección de la Fiscalía General del Estado, según desveló ayer el fiscal jefe de Alicante, José Antonio Romero. Esta denuncia se suma a la realizada en el mismo sentido a finales de enero por la Unión Progresista de Fiscales, en este caso relativa a la falta de medios de los fiscales en el conjunto de la Comunidad Valenciana.

El objeto de informe de la inspección, efectuada entre el 26 y 30 del pasado mes de noviembre, no era precisamente analizar la situación de los medios, sino evaluar la eficacia del trabajo de los fiscales de Alicante. En este apartado, la Fiscalía de Alicante obtiene una "excelente" nota. El informe, según Romero, concluye con "un muy bien" a la hora de calificar el funcionamiento general de este departamento de la judicatura en Alicante y la labor de los 82 fiscales que integran la plantilla. El informe reconoce y "felicita" el trabajo de los fiscales que, según el documento, cumplen con "celo" su labor. "Y, todo ello, pese a que somos una de las fiscalías de toda España con más carga de trabajo", puntualizó José Antonio Romero.

Sin embargo, los inspectores de la Fiscalía General del Estado no pudieron cerrar los ojos ante el lamentable estado de las instalaciones, falta medios y de funcionarios, sobre todo en Alcoi y Torrevieja. La falta de espacio "hasta límites intolerables" en Torrevieja y el "carácter insuficiente e indigno" de las dependencias del ministerio público en Alcoi, son los dos aspectos más llamativos, reflejados en el informe. En las fechas en que los inspectores cursaron su visita a la Fiscalía de Alicante, en la sede principal del órgano (en el edificio de la Audiencia) todavía era visible una montaña de expedientes que se acumulaban en una escalera interior del inmueble. Ese problema se ha resuelto unos meses más tarde merced a una reestructuración del espacio útil disponible en el conjunto de las dependencias de la Audiencia. Tampoco en esa fecha, la Fiscalía había resuelto el problema de espacio en Elche para albergar al futuro fiscal jefe de área de ese departamento, extremo que demoró la toma de posesión de su titular.La plaza de fiscal en Alicante es la menos atractiva para los representantes del ministerio público. A la precariedad de medios, recogida en el informe de la Inspección de la Fiscalía General del Estado, se suma el elevado volumen de trabajo. La Fiscalía de Alicante tramitó en 2007 un total de 228.583 diligencias previas. Este extremo provoca que casi un tercio de la actual plantilla (82 acusadores públicos) sea interina. Los dos últimos concursos públicos convocados para cubrir en propiedad 18 vacantes han quedado desiertos (a estas 18 plazas se suman otras ocho que ya estaban ocupadas también por interinos).

Los fiscales se ven abocados, además, a suplir con horas extra, el volumen de trabajo. Este último punto es aceptado con "normalidad" entre la plantilla de fiscales de Alicante, "mientras nos paguen el plus de productividad no hay nada más que decir", señalan distintas fuentes de la Fiscalía consultadas. "Donde, evidentemente, hay más malestar es por la precariedad de medios y tercermundistas instalaciones", añaden.

El fiscal jefe de Alicante, José Antonio Romero, esgrime el dato de las horas extra para justificar su denuncia del exceso de causas que tienen que atender los fiscales de la Audiencia. "El 60% de los fiscales acumula puntos suficientes a lo largo del mes para cobrar la prima de productividad", subrayó ayer Romero. "Evidentemente, que nos gustaría con contar con más fiscales, y por eso periódicamente los reclamamos", añadió. El máximo responsable del ministerio público en Alicante, no obstante, reiteró la "diligencia" del órgano judicial. "A pesar de la falta de medios y el volumen de trabajo, la Inspección nos ha felicitado", remarcó Romero.

El volumen de trabajo de la Fiscalía de Alicante queda patente en dos estadísticas: la Memoria de la Fiscalía General del Estado correspondiente al ejercicio de 2006 y la estadística del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) sobre la litigiosidad de los juzgados españoles en el último trimestre de 2007. La memoria de la Fiscalía refleja que los profesionales de Alicante realizaron un total de 13.515 escritos de calificación. El dato solo es superado por la Fiscalía de Madrid (con 25.051 escritos) y Barcelona (con 21.135). Y, según los datos del CGPJ del último trimestre del 2007, la tasa de litigios penales en la provincia de Alicante fue del 42,23%, ocho puntos superior a la media nacional, fijada en el 34,903%.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_