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Reportaje:ELECCIONES 2008

Rajoy sufre en 'su' mesa

El líder del PP gana por los pelos en el colegio donde votó siempre

A Mariano Rajoy las cuentas no le salieron ayer ni en su casa. Al cierre de esta edición, PSOE y PP mantenían una cerrada pugna, con una diferencia de apenas unas decenas de votos, en Pontevedra, la ciudad en la que ha vivido la mayor parte de su vida el candidato popular a la Presidencia del Gobierno. Allí comenzó a crecer como político desde que fue elegido concejal en 1983 y desde allí llegaría a la presidencia de la Diputación provincial y a encabezar durante más de una década la candidatura por esta circunscripción. Pero el arraigo personal de Rajoy en la ciudad demostró escasa capacidad de arrastre electoral.

En la ciudad del Lérez, el que no acaba de cuajar es el propio Rajoy, y la prueba más contundente la dio su compañero de partido y aspirante a la alcaldía, Telmo Martín, que en los últimos comicios municipales se metió en el bolsillo 42 de los 44 colegios electorales. Es más, la casualidad quiso queMartín y Rajoy compartieran también mesa, la 17-B, en el Colegio Salvador Moreno, discípulas de Jesús, antes de que el ahora líder del PP se instalara en Madrid.

Esa mesa vivió ayer cargada de premoniciones nada halagüeñas para el líder nacional del PP. Una vez abierta la urna de los Rajoy, no se oyó cantar "PP" hasta la quinta papeleta. Las tres primeras fueron para el PSOE y la cuarta para el BNG. Lo ajustado del resultado se saldó finalmente con una ligera ventaja para el PP de 13 votos: 327 frente a 314 sufragios socialistas. con un porcentaje de participación muy elevado, cercano al 70%.

Si Rajoy hubiese votado ayer en su colegio de siempre, se habría topado con una niña. Vestía harapos y enfilaba el camino de vuelta a casa desde el corcho de un aula del colegio Salvador Moreno. A sus pies, la mesa 17-B, en la que ayer aún emitieron el voto el padre del líder del PP y sus hermanos Enrique y Luis. Junto a ellos, otros notorios marianistas como la diputada autonómica Pilar Rojo, Telmo Martín, o el ex alcalde de la ciudad Juan Luis Pedrosa.

Ya en las elecciones de 2004 el fallido efecto Rajoy frustró las esperanzas de los populares de mantener cinco de los siete diputados en la provincia. Es más, el PSOE cosechó entionces sus mejores resultados en la circunscripción y se hizo con el dominio de las áreas urbanas de Vigo y Pontevedra. Ni la posibilidad de situar a un paisano suyo en La Moncloa, haciendo tándem además con otra pontevedresa, la ex ministra Ana Pastor, logró entonces evitar la pérdida de 30.000 papeletas en la provincia.

El único efecto que se ha notado hasta ahora de verdad en esa mesa fue el protagonizado por Telmo Martín en las municipales del pasado año. Entonces el ex alcalde de Sanxenxo arrasó con 629 votos, el doble de lo que había obtenido Rajoy en las generales del 14-M y de lo que volvió a cosechar ayer.

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