"Es una estupidez decir que no hay democracia en Andalucía"

Viste chaqueta-cazadora azul que le da cierto aire juvenil. Está relajado esta mañana del lunes 3, tras el cara a cara frente a Javier Arenas en Canal Sur Televisión. La caravana electoral le aguarda: sale de gira hasta el jueves. Cuatro días seguidos en los que intentará arañar los últimos votos.

P. ¿Fue un debate limpio?

R. Hubo un intento al inicio por parte del señor Arenas de ensuciar el debate, con la intención de pagar el peaje a un determinado periódico, pero lo corté en seco. Se atemorizó y no siguió por ese camino, que hubiera llevado al debate a una situación bastante más desastrosa de lo que el debate ya fue para él.

P. ¿En serio se asustó?

R. Sí, tras el primer intento de poner en duda mi patrimonio, y por tanto mi honestidad personal, algo que lleva intentado desde 1994, cuando tuvimos el primer cara a cara.

"Los retrasos en la Ley de Dependencia han podido crear cierta frustración"

"Los Ayuntamientos del PP han retrasado intencionadamente las valoraciones"

"Reconozco la fuerza, el impulso y la capacidad de la mujer en Andalucía"

"Vas a casa y tu mujer dice: 'Manolo, has estado muy serio' y sonríes más"

"Lo que haga Arenas si obtengo mayoría absoluta, ni lo sé ni me interesa"

P. Fue el debate donde salió el asunto de la casa Sundheim, de Sevilla, residencia entonces del presidente de la Junta...

R. Fue el centro del debate ese año. Porque la derecha en Andalucía ha tenido a lo largo de estos años un objetivo: destruir lo que es mi mayor patrimonio político: mi honestidad y mi credibilidad. Pero no han podido. Me pueden criticar la gestión, pueden reprocharme algún error. Pero está claro que lo que la opinión pública valora de mí es mi honestidad y mi credibilidad.

P. ¿Qué siente cuando en televisión, con casi dos millones de espectadores, ponen en duda su declaración de bienes, como si la hubiera falseado?

R. Si hay algún periodista que se dedica a la investigación, que demuestre que he falseado mis ingresos y que por tanto he mentido intencionadamente. De ser cierto, ya habría salido a la luz. Si algo tiene la Ley Electoral en Andalucía, que no existe en ninguna otra parte de España, es que pulsando una tecla del ordenador aparecen los bienes, el patrimonio y los ingresos de cada uno. Si alguien es cogido en un renuncio porque ha mentido, no le queda más remedio que dimitir.

P. Debates como el del domingo, ¿favorecen la democracia?

R. Salvo esa parte, que fue breve, fue un debate interesante. Por lo menos, vivo, ágil. Hubo dureza, contundencia, contraste. A partir de ahora, la característica fundamental de las campañas va a ser el debate televisado. Si no hay debate televisado, no hay campaña. Es ya un elemento irreversible, se ordene o no legalmente. Y el candidato que no quiera someterse a ello, tendrá bastante que perder.

P. Una reclamación constante de Arenas, que repitió en el cara a cara, es que en Andalucía no hay libertad de expresión y que usted intimida a la prensa.

R. Eso es lo más grave. La derecha cree que el poder le corresponde por derecho natural y divino y cuando no lo tiene busca excusas. Cuando se dice que en Andalucía no hay suficiente democracia o no hay libertad de expresión, no se está haciendo una crítica al presidente de la Junta, sino al conjunto de la ciudadanía. Se menosprecia la madurez, la inteligencia, la dignidad de los andaluces. Se les acusa de dejarse dominar, subyugar, de no ejercer su derecho a la libertad como corresponde en una democracia. No sólo es una barbaridad, es una estupidez. Es tanto como decir: los que votan al PP son libres, los que votan al PSOE son gente dominada.

P. Estos días reconoce en sus mítines que, efectivamente, se ha avanzado, pero no lo suficiente. ¿Qué promesa de hace cuatro años no ha cumplido?

R. Los compromisos de Gobierno son a largo plazo y no siempre empiezan y terminan en un mandato legislativo. Por ejemplo, dije en 2004 que iba a construir 22 hospitales para 2010. Hoy hay ocho construidos y cinco se están ejecutando. Prometí un ordenador por cada dos alumnos, de ellos 200.000 en esta legislatura y ya hay 221.000. Bilingüismo: dije que iba a haber 400 colegios bilingües en esta legislatura y llegar a los 1.200 en la próxima.

P. Pero qué hay de los incumplimiento....

R. Hemos tenido retrasos en la ejecución y en el cumplimiento de la Ley de Dependencia. Eso ha podido crear una cierta frustración. Pero quiero señalar que la Ley de Dependencia establece derechos, por tanto todo aquel que tenga derecho a ser asistido, sabe que desde el mismo momento en que su grado de dependencia es valorado, cobrará la ayuda. Ya estamos cogiendo velocidad de crucero.

P. ¿Por qué ese retraso?

R. Hay problemas con los ayuntamientos del PP. Los ayuntamientos son los que han hecho la primera valoración y han retrasado voluntaria e intencionadamente esa valoración. También ha habido problemas informáticos. Pero Andalucía ha sido la primera de todas las comunidades autónomas que ha puesto en marcha la ley y la que lleva un grado de ejecución mas rápido. Ya hay 24.000 personas dependientes que están cobrando su prestación.

P. ¿Planes para el futuro?

R. Pleno empleo, vivienda y conciliación de la vida laboral y familiar. ¿Es utópico? No creo. Si hemos reducido el paro a un ritmo de entre cuatro y cinco puntos por legislatura, y ahora estamos en un 12,7%, ¿por qué en siete años no podemos estar en el 4% o 5%? Si he logrado conjuntar la voluntad política de empresarios, sindicatos, ayuntamientos y cajas para construir 700.000 viviendas, ¿por qué no va a ser posible cumplir el objetivo de que los jóvenes o quienes lo necesiten tengan el derecho al acceso a la primera vivienda?

En tercer lugar, una de las cuestiones más difíciles, y sé que es arriesgado decirlo, es que en la próxima legislatura alcancemos el 3% del gasto de PIB en I+D+i. En esto momentos estamos llegando al 1%. Son objetivos ambiciosos, pero que se pueden cumplir.

P. Dijo en mitad de la campaña que le gustaría que una mujer socialista fuera su sucesora, el día que toque, en la presidencia. Hubo dos interpretaciones: una, que usted continuaba su política de defender la igualdad, con listas cremallera y presencia masiva de mujeres en su gobierno; otra, defendida por personas de su partido, según la cual se había metido un gol en propia puerta que le podría perjudicar... ¿Con cuál se queda?

R. Con la primera. Lo que he querido decir es que Andalucía puede y debe tener, en el momento en que corresponda y los ciudadanos lo decidan, a una mujer como presidenta. Ése sería el reflejo de la fuerza, de la capacidad, de la iniciativa, del impulso, del empuje que tienen las mujeres en Andalucía. No he hablado de problemas ni de procesos sucesorios dentro del PSOE porque no existen. Cualquier otra interpretación, incluso aunque haya salido de gente cercana a mí, no tiene ningún sentido.

P. Los asesores en las campañas electorales adquieren un poder excesivo. ¿Se ha dejado influenciar por ellos? ¿Cómo ha preparado esta campaña?

R. La preparación de los debates la he hecho con mis asesores. Hemos preparado papeles, contenidos, temas de gestión, de programa electoral. Si alguien piensa que tengo otros asesores que me dicen como debo poner la cara, que ropa vestir, o que tienes que levantar la mano derecha o la izquierda, se equivocan. No lo acepto ni lo he aceptado en mi vida, y seguramente no sería capaz de hacerles caso.

P. Sin embargo, usted estaba en el cara a cara con Arenas más relajado y sonriente.

R. Porque son conclusiones que saca uno mismo. Uno se critica y se autovalora. Fui consciente de que en el debate a cuatro estuve muy serio. Porque vas a tu casa y tu mujer te dice: 'Manolo, has estado muy serio'. Sucede que ella sabe que soy serio de por sí, y además algunos me dicen que la seriedad es un valor en mí.

P. ¿A su mujer si le hace caso?

R. Si, atiendo lo que me dice. Que me ponga una camisa que me sienta mejor que otra...P. ¿La sonrisa del domingo también se debe a su mujer?

R. Como me dijo que había estado un poco serio, procuré estar más sonriente.

P. Las encuestas le dan mayoría absoluta. ¿Está confiado o hay alguna posibilidad de que pierdan esa mayoría?

R. No estoy nada confiado. No me equivoco si digo que la mayoría absoluta es muy complicada y difícil.

P. ¿Si no obtiene mayoría absoluta, que cree que harán PP e IU?

R. El PP intentaría la pinza, porque nunca ha tenido escrúpulos para aliarse con quien sea. IU se resistirá. En estos momentos, IU no estaría por repetir la operación del señor Rejón en 1994.

P. Entre Valderas y Sánchez Gordillo, ¿quién querría tener al frente de IU en el Parlamento?

R. Esa cuestión la tendrán que decidir ellos. Lo que pienso es que no es bueno que los líderes de los partidos estén fuera del Parlamento. Ésa ha sido una dificultad que hemos tenido en esta legislatura: los tres líderes estaban fuera del Parlamento. Espero que no se repita.

P. Si vuelve a ganar con mayoría absoluta, ¿debería Arenas seguir en la política andaluza?

R. Arenas ha perdido todas las elecciones a las que se ha presentado. Está en las hemerotecas. Desde las primeras elecciones en las aspiró a concejal al Ayuntamiento de Sevilla. Y todavía está vivo políticamente. ¿Qué hará después del 9 de marzo? Ni lo sé, ni me interesa. Sé lo que haría yo: un político que tiene dignidad y pierde, tiene que retirarse y dejar el sitio a otro.

P. Es fácil decirlo sabiendo que va a ganar...

R. En 1996, tras la pinza, todo el mundo me daba por perdido. Si hubiera perdido las elecciones, tenía claro lo que debía hacer: irme.

P. Uno de sus flancos más débiles y por donde le atacan los tres adversarios en estas elecciones son los 18 años que lleva al frente del Gobierno. ¿Llevan razón cuando dicen que está agotado?

R. Cuando Arenas propone limitar los mandatos a ocho años, ha de saberse que eso no se ha legislado en ninguna comunidad autónoma gobernada por el PP, ni está legislado en Europa. Ningún sistema parlamentario ha establecido esa limitación. Le preguntaría a Arenas si se debe limitar también por ley que no se presente nadie a unas elecciones que haya perdido en dos ocasiones.

P. Ésta parece la campaña de los miedos. Ustedes meten miedo diciendo que viene la derecha extrema y el PP mete miedo al decir que los inmigrantes les robarán derechos a los nativos. ¿No se pasan?

R. El que la izquierda señale lo que ha representado la derecha, ha sido un argumento constante y lógico en todas las campañas electorales. En ésta, además, han utilizado la inmigración para asustar, pues ha habido un giro muy importante del PP hacia la derecha, eso que llamamos derecha extrema.

P. ¿Por qué hablan de derecha extrema? ¿No es lo mismo extrema derecha?

R. No quiero decir que sea un partido de extrema derecha, pero sí que hay una derecha muy radical dentro del PP. Esa derecha radical dice en Andalucía que los niños son analfabetos, que somos indolentes, que estamos adormecidos. Miran a Andalucía como el 'señorito desde lo alto del caballo', con esa actitud de menosprecio a aquél al que considera inferior. Hablar de los inmigrantes con el argumento de 'ahí vienen, cuidado que nos invaden', me parece intolerable.

P. ¿Cuáles serán las primeras medidas de su nuevo mandato, si, como parece seguro, es reelegido presidente?

R. Si soy presidente, lo primero será elegir director general de la Radio Televisión de Andalucía (RTVA), pues ya está aprobada la ley. Procuraré que sea con el consenso de todo el Parlamento, o como manda la ley, con mayoría de dos tercios.

[Sería necesario un acuerdo con el PP].

Segundo, quiero llevar al Parlamento la ley que garantizará el derecho al acceso de la primera vivienda para todas las unidades familiares con menos de 3.000 euros de ingresos brutos al mes. En tercer lugar, desarrollaremos los temas relacionados con las Estrategias para la Competitividad, aprobadas por la Unión Europea, con una dotación de 55.000 millones de euros

P. ¿Ha pensado ya en su nuevo gobierno? ¿Más joven, con más mujeres?

R. Tengo que cumplir la paridad y lo haré con mucho gusto. No sólo porque he sido el primero en ello, sino porque me ha dado resultado. Y no sé si será creíble o no lo que voy a decir, y es que todavía no me he puesto a pensar en ese tema.

P. ¿Si se ve en la necesidad de elegir socios, porque no tenga mayoría absoluta, qué prefiere, PA o IU?

R. Espero tener la mayoría necesaria para gobernar en solitario. Si no es así, el electorado nos dará alguna indicación u orientación.

P. Se termina la campaña. ¿Ha visto algo positivo en la oposición?

R. No he visto alternativa. El reproche que ha lanzado el PP con mayor intensidad es el cansancio y agotamiento del PSOE, sin pensar que su candidato, Arenas, lleva prácticamente los mismos años en política. Ése no es un argumento para un partido que quiere ser alternativa y que ofrece el cambio, un cambio que puede ser para peor. Un cambio para unos pocos, en vez del cambio para la mayoría. En los otros partidos, he visto mucha resignación, tanto en IU como en Coalición Andalucista, que lo único que ha intentado ha sido presentarse en sociedad. Y no se trata de una resignación como consecuencia de cómo le puede responder el electorado. A IU la he visto una resignación que es consecuencia de toda una legislatura caracterizada por los enfrentamientos y por la luchas internas que creo que le han lastrado mucho.