"Siempre pagamos el pato"
Irritación entre los viajeros de EMT y Metro por los paros
Los viajeros del transporte público vivieron ayer otra jornada amarga en Valencia. En la hora punta de la mañana coincidieron los paros convocados en el Metro y los autobuses de la EMT, lo que complicó el desplazamiento a más de 100.000 personas. "Estamos hasta el moño, siempre somos los que pagamos el pato", se lamentaba ayer Carmen García, usuaria de ambos servicios, en una estación de metro.
Los maquinistas del suburbano realizan paros de varias horas en distintas franjas horarias desde finales de enero, y la irritación de los usuarios crece con cada día que pasa. En la EMT, la huelga sumó su segunda jornada con un incidente. Una piedra lanzada contra un autobús reventó una luna en las inmediaciones de las cocheras. Los sindicatos rechazaron cualquier implicación en el suceso, mientras que el Ayuntamiento anunció que se plantea pedir refuerzos policiales para vigilar el cumplimiento de los servicios mínimos -que ayer no se respetaron- si continúa la huelga.
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