Trichet dice que reducir los tipos sería "una locura política"

"Bajar tipos sería una locura política en este momento". En Madrid y ante algunos de los primeros espadas del empresariado español, el presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, decepcionó ayer a quienes esperan una rebaja del precio del dinero para reactivar la economía. A preguntas de los asistentes al Foro ABC, Trichet negó media docena de veces que vaya a tocar los tipos. "Sería como tirarse al lago cuando llueve", dijo con cara de póquer ante la insistencia de los empresarios, entre los que se encontraban Rodrigo Rato (Lazard), Francisco González (BBVA) y Gerardo Díaz (CEOE).

Trichet se ha especializado en echar balones fuera ante la presión de los analistas y de las Bolsas. Empeñado en enfriar las expectativas de recorte, se escudó en la necesidad de "mantener la credibilidad del BCE" para que no se desboque la inflación. Pero ni siquiera eso puede tomarse como una pista. Trichet se agarró a las referencias de Alan Greenspan para cerrar el debate sobre los tipos a la espera de la próxima reunión del BCE. "Si les doy la impresión de ser indebidamente claro, deben haber malinterpretado lo que he dicho", concluyó citando al ex responsable de la Fed.

Pese a la inacción del BCE, la preocupación por el efecto de la crisis sigue creciendo. El ministro alemán de Finanzas, Peer Steinbrück, aseguró ayer que falta mucho para cerrar la crisis bancaria. Trichet dijo al respecto que la corrección de los mercados es "muy amplia, con episodios de turbulencias y alta volatilidad", y añadió que la crisis deja "muchas lecciones que aprender".