Apoyo de los alcaldes

Esperanza Aguirre hizo suyo el proyecto de desdoblar la M-501 desde Brunete a Navas del Rey pese a que su antecesor en la presidencia regional, Alberto Ruiz-Gallardón, había renunciado a ese tramo después de que el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) emitiera una declaración de impacto ambiental desfavorable.

Para ello, Aguirre buscó el apoyo de los 12 alcaldes del suroeste en agosto de 2004 (entonces eran ocho del PP, dos socialistas y dos independientes). Ante la galería utilizaba el argumento de la seguridad viaria, que fue rebatido por Ecologistas en Acción, al revelar documentos internos de Transportes que detallaban que ninguno de los 13 puntos negros de accidentes de la región estaba en la zona. Pero lo que pesó ante los alcaldes fueron las posibilidades urbanísticas.

El broche final contra el plan lo pusieron 168 científicos españoles, que alertaron a la Comisión Europea de los daños que causaba la obra. Ahora ésta obliga a una nueva declaración ambiental.