Las dos nuevas vicepresidencias de la CAM pactadas hace año, paralizadas

Todo sigue igual. Un año después del tortuoso proceso de renovación parcial de los órganos de gobierno en la CAM (Caja Mediterráneo), varios de los compromisos que permitieron entonces que la situación se desbloqueara en beneficio del sector campista siguen en punto muerto. Uno de ellos es la creación de dos vicepresidencias: una, a propuesta socialista; y la segunda, que ocuparía un representante de Murcia. El segundo es la presidencia de la Comisión de Control pactada 48 horas antes de aprobarse la renovación para el empresario jijonenco Enrique Garrigós, hombre de confianza del presidente de la Cámara de Comercio de Alicante, Antonio Fernández Valenzuela, pero que fue arrebatada por sorpresa por el murciano Juan Ramón Avilés con el apoyo de los campistas.

La falta de concreción "constata el incumplimiento"

El pulso en la CAM no se resolverá hasta después de las generales

La entrada de Avilés se produjo a última hora, mediante una "jugada un tanto turbia", recuerda un consejero. Y, pese a que el sector zaplanista confió en que la decisión fuera revocada, lo bien cierto es que a estas alturas el nombramiento se considera ya "inamovible".

La creación de nuevas vicepresidencias no se ha concretado a pesar de que la asamblea de la CAM de junio modificó los estatutos de la entidad para hacer viable la creación de un número ilimitado de vicepresidencias, que se sumarían a las tres existentes. Los socialistas respaldaron en aquel momento la modificación con la confianza de que el presidente de la caja, Vicente Sala, respetara el acuerdo que le garantizó en febrero la presentación de una lista única y su apoyo para la reelección.

El pacto incluía la creación de una nueva vicepresidencia a propuesta de los socialistas y que estaba previsto que recayera en el empresario de Novelda Jesús Navarro. La segunda, la ocuparía el murciano José García. El mismo día en que la asamblea aprobó la citada modificación de estatutos se celebró un Consejo de Administración del que salió el nombramiento de Martín Sevilla como presidente del holding financiero de la caja (Gesfinmed) y a José García al frente de Incomed, un paso que fue interpretado como muestra de las preferencias de la cúpula de la caja por estos consejeros de cara a ocupar futuras vicepresidencias.

Con todo, desde febrero del año pasado a ahora, el escenario ha cambiado. El PP logró en mayo un triunfo electoral histórico, lo que entre otras cuestiones, reforzó más aún la posición de los campistas en la CAM.

Por otro lado, el líder de los socialistas valencianos, Joan Ignasi Pla, dimitió en octubre tras conocerse que no había pagado aún las obras de reforma de su casa a una constructora con intereses inmobiliarios en ayuntamientos socialistas. Pla era el principal valedor del empresario Jesús Navarro.

La caja defiende que se solucionó el cambio de estatutos que permiten crear las nuevas vicepresidencias y asegura que este tema no se ha vuelto a plantear desde febrero y recuerda que corresponde al Consejo de Administración hacerlo. Una afirmación que contrasta con la de una fuente socialista, que asegura que se ha preguntado sobre este asunto "muchas veces". La misma fuente considera que la falta de concreción de las nuevas vicepresidencias es "la constatación de un incumplimiento" y defiende que la actitud de la entidad supone un "contraste" con lo que ocurre en Bancaixa, donde dos de las cinco vicepresidencias están ocupadas a propuesta socialista. Otras fuentes de la entidad explican que, por un lado, los socialistas deben elegir entre Jesús Navarro y Martín Sevilla, y mencionan también que el nombramiento de un representante murciano para una nueva vicepresidencia es vista "con recelo" desde la caja porque aumenta ostensiblemente "la cuota murciana". El pulso interno en los órganos de dirección de la CAM se mantiene y no falta quien asegura que no será hasta después de las elecciones generales cuando todo se clarifique.