"Somos profesores y punto"

"Somos profesores y punto. Ni en el acceso, ni en los destinos ni en la movilidad somos iguales". Ángel Amezcua, profesor del IES Zaidín Vergeles de Granada, diferencia el colectivo de docentes de la red pública de sus compañeros en la privada. "Si las condiciones del día a día no son equiparables, no entiendo por qué tienen que ser equiparables las condiciones salariales".

Amezcua, orientador con 33 años de docencia en numerosos pueblos granadinos, hace hincapié en la movilidad que sufren los profesores y el colapso que sufren ciertos concursos de traslados, un problema ajeno a la red concertada. Las diferencias salariales estarían justificadas porque la movilidad que padecen durante años supone un gasto en vivienda de alquiler, según denuncia.

Para este docente, los centros de la red pública acoge a muchos más niños con necesidades especiales y la escolarización "a destiempo" de niños inmigrantes, que podría solucionarse con un cupo en centros, sostenido con fondos públicos de reserva para alumnos inmigrantes. "Me alegro de que obtengan mejoras salariales, pero nunca me ha gustado que su plataforma reivindicativa sea la equiparación salarial. A igual trabajo, igual salario, sencillamente no es verdad", matiza.