Zapatero y Sarkozy ponen en marcha el equipo conjunto antiterrorista

España y Francia celebrarán hoy en París su primera cumbre bilateral desde la llegada de Nicolas Sarkozy a la Presidencia de la República, en mayo pasado, en medio de lo que responsables de ambos países califican de auténtica "luna de miel".

La mejora de las relaciones bilaterales se basa, según las mismas fuentes, en la apuesta del nuevo inquilino del Elíseo por fortalecer la alianza con España, frente a la progresiva inclinación de la Unión Europea hacia el este, pero también en el "afecto mutuo" y la "sintonía personal" entre ambos líderes, pese a la distancia ideológica que les separa y a su diferente carácter.

El secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Bernardino León, asegura que el Gobierno español "valora enormemente los gestos de amistad" prodigados por Sarkozy, especialmente en "momentos de tensión", como tras el asesinato de dos guardias civiles en Capbreton, el pasado 1 de diciembre.

Una muestra de la gratitud de las autoridades españolas hacia el presidente francés es su reacción ante las salidas de tono de éste. Al contrario que el Gobierno italiano, que se apresuró a contradecirlo, Zapatero no quiso negar que haya pedido a Sarkozy la organización de expulsiones colectivas de inmigrantes ilegales. León se limitó a recordar que vuelos de este tipo ya se hicieron en 2005 y que, en todo caso, estos operativos deben encuadrarse en el marco de la UE.

La inmigración será, en todo caso, objeto de una de las tres declaraciones políticas que se aprobarán hoy. Las otras dos se dedicarán a la cooperación antiterrorista y la interconexión eléctrica. También habrá un documento, suscrito por los respectivos ministros de Educación, sobre obtención de un título conjunto de bachillerato, que será el único con validez jurídica.

En la lucha antiterrorista hace falta que se pongan en marcha medidas ya anunciadas, como el equipo conjunto de investigación permanente sobre ETA, que Sarkozy y Zapatero acordaron crear el 8 de diciembre, en una entrevista al margen de la cumbre UE-África de Lisboa. Los ministros del Interior, Afredo Pérez Rubalcaba y Michèle Alliot-Marie, tienen previsto suscribir un acuerdo que precisa el alcance de esta nueva unidad y también condecorar a los policías franceses que participaron en la detención de dos de los etarras implicados en el atentado de Capbreton.

Aún más importancia tiene la declaración sobre interconexión eléctrica para las autoridades españolas, que esperan que se fije la fecha límite para decidir el trazado. El secretario de Estado de Energía, Ignasi Nieto, aseguró el martes que la línea de alta tensión discurrirá por el paso de La Jonquera, en paralelo a la autopista AP-7 y a la futura línea del AVE, y tendrá una capacidad de 1.200 kilovatios, por lo que prácticamente duplicará la actual. Nieto reconoció que este proyecto, que lleva 15 años pendiente, beneficia más a España que a Francia y atribuyó el desbloqueo a Sarkozy. El detalle del trazado no se conocerá antes de las elecciones locales francesas de marzo, dada la oposición que suscita la obra en los municipios afectados.