Trias propone gobernar el Ayuntamiento desde la oposición

Las elecciones municipales se celebraron el pasado mes de mayo y en siete meses no se ha tomado ninguna decisión de futuro y no se han afrontado con firmeza y voz propia las sucesivas crisis que ha sufrido Barcelona: apagón, averías de Cercanías de verano y problemas de socavones por las obras del AVE, que dejaron fuera de juego dos líneas de Cercanías y una de los Ferrocarriles de la Generalitat. Ése es el panorama que describió ayer el líder de la oposición en el consistorio de Barcelona, el convergente Xavier Trias, que también dio su remedio: gobernar desde la oposición.

Trias dio una conferencia con el título Ilusión, ambición y proyecto por Barcelona que arrancó de forma accidentada. Fue convocada en el Colegio de Periodistas y cinco minusválidos bloquearon el acceso precisamente porque ellos no podían acceder. Finalmente, Trias optó por trasladar la conferencia a la sede de CiU, que no tiene problemas de accesibilidad.

El de Trias fue un discurso que no inducía a ningún tipo de error: el gobierno en minoría del alcalde, Jordi Hereu, no está conduciendo a la ciudad a ninguna parte porque no tiene voz propia -"el PSC lo gobierna todo", dijo- y quien puede cambiar esa situación es el propio Xavier Trias. "El alcalde ha estado escondido, desaparecido en las crisis que hemos sufrido, y esta ciudad necesita un liderazgo claro. Hereu es el ejemplo de un gobernante que, en vez de dar prioridad a las demandas de la gente, decide primar los intereses de su partido", añadió. Para poner freno a la "regresión" de Barcelona, Trias se propuso como el mejor remedio.

El líder de CiU volvió a defender un cambio del trazado del AVE por el centro de la ciudad a la espera de alcanzar el "consenso dentro del propio Ayuntamiento" e insistió en una de las ideas -"por la que me llamaron loco", reconoció- que lanzó durante la campaña: la de levantar un parque de pisos sociales en el puerto.