Inspiraciones de la India para las algas marinas
Auka, ropa, bisutería y visiones orientales pasadas por el espíritu pequeño de una empresa donostiarra
Su bisabuela Valentina introdujo el mohair en su vida. Y fue a base de mantas, cojines y chales en colores intensos como la donostiarra Arantza Serna comenzó su recorrido personal en el mundo de la moda, tras años de colaboraciones con marcas de gran tradición.
Empezó, como dice ella misma, con algo "pequeñito" que ha ido ampliando poco a poco hasta hacerse un hueco personal y diferente. A su firma le puso un nombre que le evocaba el mar: Auka, que en euskera significa alga marina.
La colección del verano próximo incluye diseños con estampados Liberty
Tras el mohair llegaron los bolsos de piel, en unos diseños grandes, geométricos y de colores intensos, que encargaba en diferentes fábricas españolas y que vendía en el mercado a través de ferias. Pero fue en 1999, cuando Arantza Serna realizó su primer viaje a la India y cambió su vida y su producción. "El país me fascina y se mete en mi corazón para siempre", asegura la diseñadora.
Se produjo el gran salto. En la India encontró la artesanía y los tejidos bordados que han marcado desde entonces sus colecciones de ropa y bisutería. Introdujo entonces pañuelos en algodón, lino, seda y lana y con ellos sus estampados característicos, los jacquards. En 2004, irrumpió la ropa en la marca con 15 piezas cuidadas y muy estudiadas, siempre con el referente del país asiático. "Vamos a la India con nuestros diseños, compramos los tejidos y encargamos estampados y bordados propios", explica esta entusiasta donostiarra de 40 años, que tiene su taller en Barcelona.
En agosto de 2005, junto a su amigo de la infancia Mikel Lasquibar decidió aventurarse en la apertura de su primera tienda en San Sebastián, un lugar austero y luminoso, muy cerca del río Urumea. Pudo organizar así su propio espacio y, en un nuevo concepto de establecimiento, ofrecer no sólo toda su colección Auka, sino introducir otras marcas de adultos y de niños, además de objetos alejados del mundo estricto de la moda. Así, se pueden encontrar libros de arte, muñecos infantiles, algún chocolate, mermeladas, aromas, artículos de casa y vajillas o toda una línea de cremas y jabones. Todo con una misma filosofía: "Ofrecer calidad y algo especial y renovarnos constantemente".
El año 2007 fue de grandes cambios para Auka, que tomó un nuevo rumbo. Una vez más, echando mano de amigas de la niñez, Serna creó Liliketan, una nueva sociedad junto a las hermanas Iturbe, en un intento de ampliar mercado y proyectar la marca, dentro de una estructura más ordenada y completa, a la búsqueda de una mejor y mayor distribución.
A partir del nacimiento de Liliketan, el diseño y la producción de la marca se hacen en Barcelona, toda el área financiera, la gestión y el equipo de ventas se llevan desde San Sebastián y la distribución tiene su oficina en Madrid. Dentro de sus planes más inmediatos está la apertura de una nueva tienda en Barcelona, a la que espera añadir otras más.
Auka ya ha presentado su nueva colección para el verano 2008, en la que, por primera vez, han jugado con los estampados de Liberty para sus diseños y en la que no falta uno de sus productos estrella: unos largos collares de cuentas con una flor de tela de brillantes colores. Les llaman los collares forever porque, desde que se crearon hace 10 años, cada temporada los clientes los esperan y los piden.
Las prendas sueltas y ligeras de tejidos naturales y colores lisos, incluido el negro, conviven con las realizadas con estampados grandes, de mucho colorido, en sedas y satenes de telas brillantes. "Todo un poco excéntrico", asegura su creadora.
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