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Reportaje:MÚSICA EN 7D

Devotchka, Larry Willis y la duda de Babyshambles

Puede que, aunque esté anunciado, Babyshambles no actúe estos días. La fama de su líder, Pete Doherty, siempre envuelto en la polémica y aficionado a los desplantes, acarrea la duda de que su concierto llegue a celebrarse. Sería una de las actuaciones destacadas de esta primera semana de normalidad tras las celebraciones festivas. Las de Devotchka, Rosana Río, Larry Willis, Luis Aguilé y la de los madrileños Fernando Martín y José María Granados parecen actuaciones más seguras.

- Niño malo. Salvando las distancias, Peter Doherty es como el Curro Romero del rock: un día hace la faena del siglo, y al siguiente da la espantada. Hace un año canceló un concierto en Madrid pocas horas antes de su inicio. Su fama de niño malo, adicto a las sustancias tóxicas, y su polémico y sonado noviazgo con la top-model Kate Moss, le han convertido en uno de los últimos malditos del rock. La Navidad ha podido hacer estragos en su inestabilidad emocional, así que no son pocas las dudas sobre si el concierto del jueves en La Riviera se celebre finalmente. El muchacho tiene más talento de lo que él mismo cree, o no, pero puede ocurrirle lo de tantos otros artistas autodestructivos. Las canciones de Shotter's nation, el disco reciente, serían las que formarían el grueso del concierto.

El que sí se sabe ya que no actuará esta semana, aunque por otros motivos, es Jason Molina, el hombre que cautivó al frente de la banda magnolia Electric Co, y que tantas expectativas había levantado ante su actuación en solitario en un pequeño club madrileño. Para su suspensión, el artista esgrime motivos personales de fuerza mayor que no desvela.

- Mexicana. Siguiendo la estela de Lhasa, Lila Downs o Sasha Sokol, la mexicana Roxana Río presenta las canciones de Versos de agua. Jarochas, guapangos y corridos, vistos desde el siglo XXI con emoción. Estremece una versión muy íntima de la archiconocida canción La llorona, que tantas versiones tiene.

- Beatles y cine. La semana arranca con Choral Beatles, una reinterpretación de las canciones del cuarteto de Liverpool a cargo de los niños cantores de la Coral Kennedy, que actúa con fines benéficos. Por su parte, el cine dio a conocer a Devotchka, un divertido grupo norteamericano que aúna la música popular de la Europa del Este con el punk, el folclor latino, el swing y el rock and roll. La banda sonora de la deliciosa película Pequeña Miss Sunshine reproducía muchas de las canciones de su disco How it ends, lo que les sirvió para salir del anonimato.

- Madrileños. Crononauta es el primer disco en solitario de Fernando Martín; En Madrid, el cuarto de José María Granados. Ambos los presentan estos días en sendos conciertos que de alguna manera reviven cierto espíritu de la nueva ola madrileña. Martín defiende el pop inteligente -tanto en su faceta de artista, iniciada en los ochenta con el grupo Desperados, como en su faceta de periodista musical- y Granados su papel de excelente narrador de crónicas cotidianas, que ya dejara ver en los primeros ochenta al frente de Mamá, la tercera pata, junto a Nacha Pop y Los Secretos, de la escuela de power pop madrileña.

- Titanes. El pianista neoyorquino Larry Willis ofrece un concierto estos días que servirá para abrir boca de la semana entera que se va a pasar en el Central a finales de mes. A sus 63 años, es uno de los grandes héroes del jazz. Ha llegado a tocar con Dizzy Gillespie, Carmen McRae y Stan Getz, entre otros, además de haber compartido sueños latinos con Jerry González en Fort Apache (así aparecía en el documental de Trueba, Calle 54) y de fusión con el rock en Blood, Sweat and Tears en los setenta.

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