Colonial vende activos a Abertis y La Caixa por 308 millones en plena crisis

Colonial, que vive un arranque de año convulso tras su espectacular desplome en la Bolsa y la salida de su cúpula de Luis Portillo, otrora uno de los reyes midas del ladrillo, ha obtenido 308,6 millones en las últimas horas en ventas de activos. Los compradores son La Caixa, que hasta el verano de 2006 era el accionista de referencia de la inmobiliaria, y Abertis Logística, filial del grupo de gestión de infraestructuras participado por la caja y la constructora ACS.

La inmobiliaria, que preside desde el pasado lunes su también consejero delegado Mariano Miguel Velasco, arrastra una voluminosa deuda de 9.300 millones (el nivel de endeudamiento sobre activos es del 66%) e intenta soltar lastre para hacer caja, al igual que la mayoría de empresas de su tocado sector.

El relevo en la cúpula, forzado por los compañeros de viaje de Portillo (con un 40,64% del capital) en el accionariado, se confirmó el lunes, en un consejo que queda reducido de 19 a 11 miembros, con 11 salidas y tres caras nuevas: Leandro Martínez-Zurita, Julián Zamora y Pedro Ruiz-Labourdette. En las horas previas al relevo, Portillo barajaba la posible entrada de otros socios como Joaquín Rivero en la empresa.

Portillo (40%) deja los tres puestos que controlaba en el consejo. También se van los representantes de otros accionistas como Nozar (12,3%), Alicia Koplowitz (9%), Aurelio González (5%) o José Ramón Carabante (4,2%). En total, los cesantes controlan más del 70% de la empresa. La compañía señala en un comunicado que la "salida del consejo de los accionistas significativos no presupone la intención de reducir su participación en la sociedad", aunque no se descarta esa posibilidad.

De resultas de las ventas de activos, La Caixa pasará a ser dueña de una de las emblemáticas torres negras de la Diagonal de Barcelona que acogen su sede. La otra torre, la más elevada, ya pertenecía a la primera caja española desde hace tres décadas.

La entidad que preside Isidre Fainé ha comprado la torre más baja -de 12 plantas de altura, que ocupa parcialmente el grupo y donde trabajan 700 personas- por un importe de 107 millones. La operación incluye varios locales en el perímetro de la torre diseñada por los arquitectos Josep A. Cordech de Setmenat y Jordi Martí y la zona de aparcamiento. En un comunicado, La Caixa explicó que la operación responde a su "voluntad de asegurar la propiedad de los inmuebles que ocupa su sede central".

El pacto por el que Abertis compra a Colonial cinco zonas de actividad logística está valorado en 201,6 millones. El grupo dirigido por Salvador Alemany desligó la transacción de la delicada situación por la que atraviesa la inmobiliaria. La cabeza de Portillo saltó después de que la empresa se hundiera en el parqué un 25,4% el pasado viernes, última jornada bursátil de 2007. Este desplome se sumó al del día anterior, de un 16,56%, y convirtió a Colonial en la acción del Ibex que más cayó en el año: un 63,64%.

Un portavoz de Abertis explicó que la compra de activos a Colonial responde a "un concurso entre privados convocado hace meses que ha ganado el grupo" y que ayudan a su filial logística a "establecer una base en el centro de la península Ibérica" desde la que tejer una red de parques logísticos. Abertis Logística, presente en Barcelona, Sevilla, Álava y Lisboa (además de Chile), no estaba hasta ahora en Madrid, y tiene pendiente crecer en Valencia. Los activos adquiridos (en Madrid y Barcelona) suman 400.000 metros cuadrados de superficie (250.000 alquilables). La mitad está en fase de comercialización.