Final de la 'Champions'
El 21 de marzo, Viernes Santo, hay luna llena. Al día siguiente, de día, corre Freire. El 20 de mayo, martes, también hay luna llena. Al día siguiente, de noche, se juega la final de la Champions en Moscú, bajo las barbas de Lenin, en un recinto que fue olímpico en 1980 y que deberá levantar su moqueta de césped artificial para plantar hierba natural.
¿Iluminará esa luna casi llena sobre el estadio Luzhniki la décima del Madrid? ¿O la tercera del Barça? ¿La segunda de Rafa Benítez con el Liverpool? ¿La primera de Cesc (y de su Arsenal), primera etapa en su camino hacia el Balón de Oro que le espera dentro de 12 meses? ¿O será noche de llanto y crujir de dientes, noche italiana? ¿Del Milan llegando a ocho y acercándose peligrosamente a la cima del Madrid? ¿Del Inter regresando de la prehistoria y, 43 años después de la segunda, levantando su tercera Copa de Europa?
