Una vía para crecer 20.000 habitantes
El paso por Segovia de la línea de alta velocidad entre Madrid y Valladolid es el final de una vieja aspiración en esta provincia, que veía cómo se la podía partir en dos mitades sin obtener ningún tipo de beneficio, cuando comenzaron a proyectarse los primeros corredores hacia el norte y el noreste peninsular, a finales de la década de los ochenta.
La llegada del AVE marcará, según el alcalde Pedro Arahuetes (PSOE), un antes y un después en la actividad económica segoviana y supone el comienzo de un "futuro esperanzador", tanto para la capital como para los municipios del entorno. En el plazo de unos 15 a 20 años se prevé un aumento de la población de Segovia de entre 15.000 y 20.000 habitantes, que se sumarán a los 55.000 actuales.
El nuevo Plan General de Ordenación Urbana, a punto de entrar en vigor, liberará terreno para un total de 18.000 viviendas, a construir en un plazo de diez años. Los expertos en materia económica sostienen que, a corto plazo, habrá un importante despegue económico en sectores como el turismo o los servicios. Un estudio de la Cámara de Comercio ha calculado que a Segovia llegarán, a lo largo de 2008, un total de 1,4 millones de viajeros. El mismo informe estima que utilizarán diariamente el nuevo transporte alrededor de 4.000 personas.
A medio y largo plazo, de acuerdo con los sectores económicos, el despegue se percibirá en el sector industrial segoviano, con asentamiento de empresas vinculadas a la logística, a las tecnologías digitales o a la formación de directivos, entre otras actividades.