Creando 'raúles'
El Madrid forma a los responsables de la cantera en técnicas para desarrollar el talento y la autoconfianza de los jugadores
Para curar a los mingafrías, esa raza de futbolistas de gran calidad que, faltos de carácter o capacidad mental, no se expresan en su plenitud sobre el césped, Javier Clemente, directo y expresivo, proponía meterles "una guindilla en el culo". Otros técnicos recurren a la arenga militar, que se revela estéril y peligrosa: el motivador se desmotiva, el motivado se bloquea.
"Era el gran fracaso. Pensabas que te lo jugabas todo al salir al campo y no dabas una", cuenta Imanol Ibarrondo, que ha sido central -fornido, fuerte cabeceador, algo rígido de cintura- del Rayo y que siempre ha lamentado que en su carrera nunca entendiera casi nada. Pocos años después de su retirada y tras descubrir el coaching (instrumento de desarrollo de talento y productividad de los directivos de empresa), ha dado un nuevo sentido a su vida y, promete, a la de los futbolistas. "El coaching aplicado al fútbol es una técnica para el desarrollo del talento", dice Ibarrondo, de 40 años, que ha llegado a un acuerdo con el Madrid para que su empresa, Incoade, radicada en Bilbao, forme en coaching a los responsables de la cantera blanca y se pase en el vestuario de la intuición y la emoción a la reflexión y la introspección al fortalecer la autoconfianza. "Que se sepan los mejores, hacerles felices, que no teman fallar", dice Ibarrondo; "porque la felicidad es la ausencia del miedo. Y, sobre todo, de que disfruten jugando".
Frente a su ejemplo, a su experiencia -resumida en una noche en el Camp Nou en la que el Barça ya ganaba al Rayo por 5-0 a la media hora y lo único que pedía a Dios es que le hiciera desaparecer del campo-, Ibarrondo contrapone la de Raúl, el líder del Madrid actual. "Raúl ni es un gran regateador, ni un gran rematador ni un gran cabeceador", dice Ibarrondo, "y, sin embargo, es el más admirado, el más temido, el máximo goleador. ¿Por qué?"
La respuesta la tiene una herramienta llamada Feedback 360, ideada para directivos y que Ibarrondo ha trabajado para aplicarla al fútbol. "Mediante 60 preguntas al jugador, a sus compañeros, a sus técnicos, obtenemos una foto fija, evaluable, tabulable, de ocho aspectos de su personalidad: liderazgo, autocontrol, competitividad, motivación, autoconfianza, compromiso, autoconocimiento y cooperación. No será tanto cómo es, sino cómo se le percibe. A partir de ahí, el jugador toma consciencia y él mismo es el que encuentra la forma de superarse, de mejorar". Raúl daría el máximo en todos los aspectos. Cuenta Ibarrondo que la única premisa es la pasión del jugador. "Si conseguimos en cada equipo a tres o cuatro raúles, el cambio será espectacular".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.