Rijkaard llama al orden a Ronaldinho
El técnico del Barça obliga al delantero a ejercitarse más que a los titulares ante el Deportivo
Juega de titular, pero se entrena como suplente. Por mucho que le distinguieran sus últimos esfuerzos y entrenamientos, a Ronaldinho le falta coger el tono físico adecuado. O eso es lo que piensa Frank Rijkaard, el técnico del Barça, que ayer se lo dejó bien claro sobre el campo de entrenamiento al impedirle abandonar la sesión junto con el resto de los futbolistas titulares ante el Deportivo. Fue una advertencia, un consejo y una llamada al orden del entrenador, empecinado en recuperar al mejor 10, que recoge generosos y agradecidos aplausos del Camp Nou, pero que no completa una noche mágica desde hace un año.
Tras buena parte de la sesión de ayer, todos los futbolistas que salieron de inicio ante el Depor enfilaron el vestuario. Así lo interpretó Ronaldinho, que disputó el encuentro entero y se marchó junto a Messi. O lo intentó. Rijkaard, que se percató del desmarque del jugador, torció el gesto y obligó al brasileño a continuar con los ejercicios. Algo que no le sentó muy bien a Ronaldinho, que solicitó la complicidad de los médicos, quienes le correspondieron con un ligero levantamiento de hombros en señal de respeto a la jerarquía. Desganado, Ronnie dio media vuelta y no disimuló al forzar un trote pasota. También lo vio Rijkaard, que, sin malos modos, dio una carrerita y le cogió del brazo para reactivarlo y arrastrarlo al ritmo que exigía el ejercicio.
Mosqueado y desbravado, Ronaldinho acabó junto con Giovani las tandas de ejercicios físicos específicas para fomentar la salida en velocidad, una de las carencias más evidentes del futbolista en los últimos meses. Acto seguido, se quedó detrás de una portería con aire desafiante al tiempo que sus compañeros ejercitaban la suerte de los disparos a la portería. Al minuto, Rijkaard le dio el permiso para irse.
También suda la gota gorda Eto'o, concentrado en recuperar su forma tras la lesión en el recto anterior que le mantuvo inactivo más de tres meses. "Para ser el auténtico Eto'o sólo me falta la chispa y el olfato", aseguró el delantero, que se refirió de nuevo a su posible marcha con Camerún para la Copa de África. "Quiero jugar al fútbol. Yo seré feliz con mi país y con el Barça e iré donde me manden", convino el ariete; "pero no puedo decir qué haré. Txiki Begiristain
y el club están trabajando en ello y nadie sabe qué va a pasar". Con casi toda probabilidad, Eto'o se incorporará a su selección a partir del 12 de enero, justamente después de que el Barça se mida con el Murcia.
Se marcha Eto'o al tiempo que se intenta recuperar a Ronaldinho, que. tras dos encuentros en el banquillo, ambos en campo ajeno, recuperó la titularidad en el Camp Nou ante el Depor. Para el futuro, sin embargo, debe ganársela como suplente en los entrenamientos. Rijkaard estuvo tan condescendiente el domingo, cuando le alineó junto a Eto'o en una decisión que pareció política, como exigente ayer en la práctica.
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