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Reportaje:Decimoquinta jornada de Liga

El Madrid da otra vuelta al medio campo

Schuster se plantea prescindir de Sneijder y Gago para alinear a Diarra, Guti y Baptista en San Mamés

Diego Torres

El estilo de los grandes equipos depende de su centro del campo. El Barça tiene a Xavi, a Deco y a Iniesta. El Arsenal tiene a Cesc y a Flamini. El Milan tiene a Pirlo y a Gattuso. ¿Y el Madrid? El Madrid es un líder sin estilo porque juega un día con Diarra, otro con Gago, y otro con Guti, o Sneijder. De vez en cuando coinciden. Pero la nota dominante es el desencuentro. El técnico, Bernd Schuster, que ha dado con su zaga y su ataque, lleva cuatro meses mezclando elementos en busca de su línea media ideal. Todavía no la encuentra. Pero en estos días ha hecho ciertos descubrimientos que le pueden alumbrar el camino. El último se llama Julio Baptista.

"Todos coincidimos en que Baptista lo ha hecho muy bien", dice el técnico
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Ayer, Schuster adelantó que el brasileño será titular ante el Athletic (San Mamés, 22.00). "Es muy probable que Julio vuelva a jugar mañana [por hoy] desde el principio. Todos estamos de acuerdo en que Baptista lo ha hecho muy bien".

Si el entrenador mantiene su palabra -cosa improbable- y acierta, el Madrid será objeto de una paradoja: resolverá el dilema del medio campo con un rematador.

Baptista es el último eslabón de una cadena de ensayos que se remontan al verano. Lo primero que advirtió Schuster cuando empezó la temporada fue que Diarra y Guti eran imprescindibles. El africano porque es el único especialista defensivo de la plantilla y sabe mejor que sus compañeros cómo coordinarse con los centrales cuando el equipo no tiene el balón. Guti, porque es el que mejor sabe hacer aquello que define al juego: pasar la pelota.

Decidido el medio centro y el media punta, a Schuster le quedó una tercera incógnita por resolver: el volante de acompañamiento. Hasta la última jornada, este papel unas veces ha sido para Gago, otras para Sneijder, y otras para Drenthe. El Madrid experimentó con todos ellos en seis formaciones diferentes. Las alteraciones se sucedieron hasta la crisis de Bremen.

En Bremen, donde el Madrid perdió ante el Werder (3-2) hace diez días, Schuster tuvo otra revelación: Gago y Diarra no consiguen acomodarse juntos y probablemente nunca lo hagan. La superposición los lastra.

Al regresar de Alemania, el cuerpo técnico del Madrid obró con la lucidez propia de quien pasa por una crisis. Contra el Racing, Gago fue al banquillo, Diarra se situó como único medio centro y Baptista disfrutó de su primera titularidad de la temporada actuando como interior. El brasileño lo hizo tan bien que a los diez minutos del partido ya había dado un pase de gol. Recuperó cinco balones, se mostró hábil en la distribución y obró con inteligencia.

"Baptista es ejemplar", dijo Schuster, en lo que pareció un cambio de orden. El brasileño se había ganado el respeto de su entrenador después de cuatro meses sin apenas gozar de minutos. Hasta el partido contra el Racing, Baptista no sumaba 90 minutos en 13 jornadas de Liga. Cada vez que el entrenador le mandó a la grada se sintió herido en su orgullo. Consideró que un titular de la selección de Brasil no merecía tan poco crédito. Pero no dijo nada. No se quejó nunca y procuró conservar su natural optimismo para entrenarse con alegría. Se autoconvenció de que tarde o temprano tendría una oportunidad. Lo que no creyó Baptista fue que la ocasión le llegaría en forma de reclamo para cumplir misiones en el centro del campo.

Contra el Athletic, Schuster estudia situar a Diarra, Guti y Baptista por detrás de los delanteros. Sería un trío inédito. Una fórmula nueva en una jornada en la que el Madrid no tiene que defender su posición en la cabeza de la tabla sino solamente consolidarse en ella.

El técnico alemán insistió en que la visita a San Mamés carece para él de un interés especial. "Es un partido más", dijo, seco. "Es en abril y mayo cuando se juegan los títulos, no ahora".

Ahora Schuster está empeñado en que su Madrid juegue bien. Y eso depende, sobre todo, del medio campo.

Julio Baptista celebra su gol ante el Betis.
Julio Baptista celebra su gol ante el Betis.ULY MARTÍN

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Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

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