El interventor advierte de un desfase en el presupuesto de Castellón

El presupuesto elaborado por el Ayuntamiento de Castellón no cumple el objetivo de estabilidad presupuestaria, un precepto estipulado por ley. Así lo señala el interventor municipal en un informe, al que ayer tuvieron acceso los grupos de la oposición, que deja en dos las opciones del equipo de gobierno del PP. O reelabora las previsiones de gastos para ajustar los 5 millones de euros de desfase detectados o redacta un plan económico-financiero que deberá aprobar en un plazo máximo de tres meses y que someterá las cuentas para los próximos tres años y a la tutela financiera de la Dirección General de Coordinación Financiera con las Entidades Locales.

El informe de intervención supuso ayer un nuevo motivo para que el portavoz del grupo municipal socialista, Juan María Calles, retomara la crítica a la gestión económica del PP en el Ayuntamiento de Castellón. "Las críticas lanzadas desde el inicio del mandato estaban plenamente justificadas, como se puede comprobar ahora", señaló. Por ello, Calles reclamó la retirada del presupuesto fundamentada en criterios políticos, "porque el proyecto presupuestario no resuelve los grandes proyectos y las grandes necesidades de Castellón" pero, sobre todo, porque incumple el objetivo de estabilidad presupuestaria que establece la ley.

El portavoz socialista resumió el informe del interventor afirmando que "el PP ha previsto unos ingresos de 153 millones de euros y unos gastos de 158 millones de euros". Así, en el caso de que el equipo de gobierno opte por la redacción de un plan económico-financiero, el socialista ha exigido que no se apure el plazo de tres meses que otorga la ley sino que, tal como también contempla la norma, se apruebe en el mismo pleno en que se debate el presupuesto. Para Juan María Calles, "al PP no le salían las cuentas y ha tenido que recurrir al incremento de la presión fiscal". Añadió que "define la cortedad de miras de un equipo de gobierno incapaz de atraer inversión pública".