El reinado de Pereza

Laura Ramón hace cola como todo el mundo. Pero si quisiera no sería necesario. Su cara, junto a la de su amiga Mar, estaba impresa ayer en las 9.000 entradas que el grupo Pereza dio anoche en el Telefónica Arena. Laura y Mar fueron elegidas hace meses en un reñido casting para aparecer en la portada de Aproximaciones, el quinto disco del dúo madrileño.

Ayer Mar, por su trabajo (es azafata de vuelo y estaba en los Emiratos Árabes), no pudo ver el concierto, pero Laura fue testigo de la electrizante actuación de uno de los más grandes grupos de rock español actual.

Quedaban diez minutos para que Pereza, Rubén Pozo de 31 años y Leiva de 27, subiera al escenario y el pabellón estaba hirviendo. Laura entraba a la zona Vip casi al mismo tiempo que el ex jugador del Real Marid, Michel. "Me gustan mucho", dijo el ex futbolista. "Y muy a pesar de mis hijos, yo los conozco antes que ellos". Entre el público también se pudo ver a Dover, Amaral y a un emocionado Johnny Cifuentes, cantante de Burning, grupo de cabecera de Pereza.

A las diez de la noche, y con la sintonía del Equipo A, Pereza apareció sobre el escenario. Leiva se puso de rodillas y agarró su guitarra. Las 9.000 personas gritaron y Laura sonrió de oreja a oreja. Imposible achacarlo al alcohol porque en el pabelló sólo se vendía cerveza sin . El dúo entró fuerte. Manager de rock, dio la guitarrera salida a un gran concierto. Hasta bien pasada media hora no hablaron, sólo cantaron. "Por fin hemos llegado hasta aquí", dijo Leiva. "Después de que nos pongan multas de tráfico por conducir borrachos toda la noche por no tener hotel".

Entre guiños a los Beatles y a sus adorados Stones, llegaron a los momentos emocionantes: Tristeza y Por las tripas (donde hablan a tumba abierta de su ajetreada vida nocturna con Maradona en las pantallas de fondo) pusieron los pelos de punta. Aquellos dos adolescentes que se conocieron en un bar de Madrid, tocaron el cielo.

"Yo nací para estar en un conjunto. Descuidando novias, clases y curro. Planeando el asalto al mundo", cantaron ayer Pereza. Esos dos tipos flacos, que soñaban con ser Keith Richards lo han conseguido. Su próxima parada: llenar los 18.000 asientos de Las Ventas. Será en junio y Laura y Mar estarán allí.