¿Existen los padres alienadores de hijos?

¿Hay padres que vuelven en contra del otro a los hijos menores durante un proceso de separación conflictivo? Lo que para algunos expertos son niños que sufren el síndrome de alienación parental (SAP), para otros es un instrumento sin base científica.

Entre estos últimos se encuentra un grupo de profesionales de la medicina y la salud mental, organizaciones jurídicas y asociaciones de mujeres, que ayer presentó en Barcelona un manifiesto para informar "sobre el falsamente llamado síndrome de alienación parental". El psiquiatra estadounidense Richard Gardner lo describió en 1985 como la aversión que un menor desarrolla hacia un progenitor por la influencia perversa del otro.

La psiquiatra Consuelo Barea afirmó ayer que la alienación parental se está usando "como un artefacto legal sin base científica para conseguir custodias para padres y, en lo penal, sobre todo en otros países, para eximir de culpa a pedófilos, abusadores y maltratadores de sus hijos". El manifiesto tacha a Gardner de ideólogo pro pedófilo y sexista y califica la terapia que propuso como "la de la amenaza, la coacción legal, "y tiene el efecto perverso de invertir la carga de la prueba y dar por sentado que las madres son culpables y que tienen que demostrar su inocencia en un juzgado", dijo la abogada Eva Pleguezuelos, de la Asociación de Mujeres Juristas Themis.

Estas asociaciones proponen que en casos en los que se observen problemas entre menores y progenitores se descarte primero cualquier situación de abuso y de violencia, "cosa que actualmente no se hace", pero también cargaron contra psicólogos, jueces y entidades como el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid por defender el síndrome. Por otra parte, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha dictado sentencias contra varios países por casos de alienación parental.

La rueda de prensa se zanjó precipitadamente cuando intentó participar el padre de la pequeña Judit, al que una juez de Manresa le otorgó la custodia tras retirarla de la madre por la fobia que le había creado sobre éste. El padre se quejó ayer de afirmaban que es un maltratador y agregó: "Tengo tres sentencias que dicen que no ha habido maltrato y ahora mi hija está perfectamente conmigo".